¿Qué son y para qué sirven las reservas?
Cada vez se hace más común escuchar afirmaciones como la siguiente: “¿Cómo puede ser que el Banco Central de Reserva (BCR) tenga casi 64 mil millones de dólares en reservas y al mismo tiempo existan tantas necesidades sociales por cubrir?”. De ahí la pregunta: ¿Qué son las reservas y qué uso tienen?
De acuerdo con la Constitución vigente, las reservas son administradas
por el BCR y están constituidas por tres componentes: en primer lugar,
la denominada posición de cambio, conformada por las compras de dólares
que hace el BCR en el mercado libre, básicamente a los bancos
comerciales. En segundo lugar, los encajes en dólares de los bancos
comerciales; en tercer lugar, los depósitos en dólares del sector
público en el BCR.
La misión del BCR es evitar fluctuaciones bruscas en el tipo de cambio o
precio del dólar, sea hacia el alza o hacia la baja. En los últimos
diez años, aproximadamente, observamos que el precio del dólar viene
bajando; en una entrega anterior expliqué las razones. Cuando ello
ocurre, el BCR compra dólares que van a reservas, más específicamente a
la posición de cambio; los dólares los compra con soles que son
inyectados al sistema; con el objetivo de evitar que el exceso de soles
genere problemas inflacionarios (recuerde que el objetivo único del BCR
es mantener la estabilidad monetaria, entendida como el logro de un
rango meta de inflación entre 1% y 3% anual; en 2012, la inflación cerró
en 2.66%), el BCR vende certificados BCRP a los bancos y con ello
“esteriliza” (retira) los soles en exceso. En otras palabras, el BCR
emite unos bonos, llamados certificados BCRP que rinden un interés y
cuando el banco comercial los compra le entrega soles al BCR y se queda a
cambio con el bono. De este modo, el BCR retira cualquier exceso de
soles de circulación.
Ahora bien, ¿siempre fue así? es decir, ¿el tipo de cambio siempre ha
tendido hacia la baja? La respuesta es negativa; podríamos decir que lo
“normal” en los últimos treinta años del siglo anterior es que el dólar
suba. En esas circunstancias lo que hacía el BCR era vender dólares para
evitar un aumento brusco. Y ahí usaba las reservas. Entonces, la
finalidad básica de las reservas es tener un “colchón” que nos proteja
ante una salida de capitales que haga subir el tipo de cambio, tal como
ocurrió a fines de la década de los noventa.
En consecuencia, un objetivo de las reservas es evitar un aumento brusco
o inesperado en el tipo de cambio; no debemos olvidar que la economía
peruana es pequeña y está abierta al exterior, por lo que está sujeta a
que los capitales puedan salir del país, sin ninguna razón vinculada con
la solidez económica del país, sino por razones externas al Perú. En
1998, tras la crisis rusa de agosto de 1998, los capitales, debido a un
efecto “contagio”, salieron del país en la búsqueda de lugares más
seguros. No es casualidad que esos dólares que salieron de Asia y
América Latina se dirigieran a Estados Unidos y Europa, originando,
entre otras razones, un boom crediticio que luego traería consecuencias
negativas, expresadas en la primera crisis financiera internacional del
siglo XXI.
Un segundo objetivo de las reservas es el uso que puede hacer de ellas
el BCR cuando actúa como “prestamista de última instancia”, es decir,
cuando acude al rescate de bancos comerciales, en caso atraviesen por
una escasez temporal de liquidez o enfrenten una corrida de depósitos
(pánico bancario), sin ninguna razón justificada. Presta los dólares, no
los regala. Es justamente esta función la que no tienen los países
miembros de la eurozona, pues no “tienen” banco central; esas funciones
están confiadas al Banco Central Europeo, quien requiere unanimidad para
decidir si acude al rescate de bancos griegos, españoles o chipriotas,
por ejemplo.
Por lo tanto, el BCR solo puede usar las reservas, en general, para los
dos objetivos descritos, pero nada más; no pueden ser usados para
aumentos de sueldos ni préstamos al sector público, ni ninguna otra
razón que no sea alguna de las descritas.
¿Cómo se miden? Hasta hace algún tiempo se medían a partir de cuántos
meses de importaciones podían cubrir. Ahora, se miden por la capacidad
del país de afrontar sus deudas externas de corto plazo; en otras
palabras, qué porcentaje de las deudas privadas y públicas de corto
plazo con el exterior, pueden ser cubiertas con las reservas. Me
explico. Supongamos que el Perú tiene que pagar por concepto de deuda de
corto plazo 1000; si tiene más en reservas, en caso que algún banco
tenga dificultades de liquidez el BCR puede “prestarle” los dólares para
que cumpla con sus pagos, evitando así cualquier problema de pagos. De
ahí que sean una señal de solidez macroeconómica del país.
Al 28 de diciembre de 2012, el BCR tenía 63 986 dólares en reservas, de
los cuales, 46 059 correspondían a la posición de cambio. Los casi 64
mil millones de dólares en reservas son un monto mayor al que tienen
economías más grandes que la peruana, como Argentina, Colombia, Chile y
Venezuela.