¿Dónde estudiar un MBA?
Agosto marca el inicio de la mayoría de los programas de MBA en Estados Unidos y, de manera paralela, avanzan las rondas de postulación para las promociones que comenzarán a estudiar el próximo año. Algunos empiezan a preguntarse si deberían aplicar a un programa de MBA y, de hacerlo, a qué universidades deberían aplicar. En ese sentido, me gustaría compartir algunos consejos que creo serán de utilidad para quiénes están considerando aplicar a un MBA o ya están preparando su postulación.
A continuación, 5 preguntas a considerar al decidir dónde estudiar tu MBA:
1. ¿Qué quieres hacer después?
Esta pregunta es la más importante pues muchos de los criterios a considerar al evaluar un programa de MBA parten de responderla. Tener una idea de la industria o función que buscas desempeñar al graduarte es crucial para determinar el tipo de cursos a priorizar, la ubicación a elegir, y tener en cuenta otros factores como el posicionamiento o foco de las universidades en determinados sectores.
Investigar sobre clubs o programas relacionados a temas específicos es clave, sobre todo, porque podemos sorprendernos en el camino. Por ejemplo, me sorprendió el enfoque que tiene Columbia en Retail Luxury Goods (de manera complementaria a otras industrias con mayor representatividad como Consultoría o Banca de Inversión) o el foco de Harvard en Entrepreneurship u otras nuevas ramas como Influencer Marketing.
2. ¿Cuál es tu estilo de vida?
Esta pregunta no se suele priorizar al elegir un MBA pero es sumamente importante. El estilo de vida que tendrás en los dos años -o año y medio- de estudio (si estudias a tiempo completo) será muy distinto si vives en una gran ciudad o en una ciudad más chica. No hay decisión correcta o incorrecta, pero ambas tienen pros y contra. ¿Queremos estar cerca a un aeropuerto y/o contar con un vuelo directo a nuestro país de origen? ¿Queremos estar ubicados cerca de la naturaleza? ¿Queremos tener acceso a más restaurantes o locales comerciales? ¿Queremos estar cerca de alguna empresa o sector específico? ¿Preferimos algún tipo de clima en particular? Todas son preguntas válidas que deberíamos tener en cuenta.
3. ¿Qué buscas en el plan de estudios?
Esta pregunta tiene dos grandes componentes. El primer componente es la malla curricular. Muchos de los cursos “generales” son similares en los distintos programas de MBA. Sin embargo, en los cursos electivos algunas universidades destacan entre sí. Es importante revisar la malla curricular de cada programa y preguntarnos si los cursos que ofrece van de acuerdo con nuestros intereses. Por ejemplo, si queremos llevar cursos sobre Cambio Climático o Transformación Digital, debemos buscar un programa que se enfoque en esos frentes. De la misma forma, debemos revisar la plana docente si nos interesa llevar cursos con algún profesor en particular.
El segundo componente es la rigurosidad académica y esta difiere mucho entre programas. Es importante conectar con exalumnos para conocer sus experiencias y elegir un programa que se alinee a nuestras expectativas.
4. ¿Cuál es tu presupuesto?
En el lado financiero, me gustaría diferenciar tres elementos. El primero es el costo del tuition del programa de MBA sumado al costo de vida de la ciudad que elijamos para vivir. Este es un elemento sumamente importante y, sin duda, está sujeto a nuestro presupuesto, pero no es el único criterio a considerar al momento de decidir. El segundo elemento son las becas o planes de financiamiento que otorgan ciertos centros educativos. Es importante investigar qué facilidades brinda cada universidad pues una beca o facilidad de pago específica puede convertirse en el criterio determinante de nuestra decisión. Finalmente, el tercer elemento a considerar es el salario promedio anual post-MBA. Cómo en toda decisión financiera es importante evaluar el retorno esperado antes de invertir. Esta información es pública y se puede encontrar en los reportes de empleabilidad de cada universidad.
5. ¿Cuál es el componente internacional del programa?
Finalmente, un punto que también deberíamos considerar es el porcentaje de alumnos internacionales que comprende cada programa de MBA en el extranjero. La diversidad de perfiles y nacionalidades enriquece la experiencia y las lecciones que nos llevamos del programa. Es increíble estar en un aula rodeada de estudiantes de todas partes del mundo. Adicionalmente, una universidad enfocada en atraer estudiantes internacionales brinda mucha más información, facilidades y recursos específicos para extranjeros.
Me gustaría cerrar diciendo que tanto la decisión de estudiar un MBA como la elección de dónde hacerlo es sumamente personal y depende mucho del momento en el que nos encontremos en nuestra vida profesional. No es una decisión fácil ni rápida, pero espero que estos consejos hayan facilitado -aunque sea un poco- el proceso.