Mi jubilación: Tan cerca, tan lejos
Bien dicen que “los años se pasan volando” y que sin darnos cuenta la agitada vida del periodo laboral pasará a ser más descansada junto a la esperada “jubilación”; palabra tan lejana cuando recién se empieza, más aún inimaginable de planificación si se está entre los 20 y 50 años, pero hoy hablaremos de lo importante que es el ahorro previsional en las finanzas personales.
Los tiempos han cambiado y se nos ha hecho tan usual ver personas que alcanzando el límite legal de edad siguen trabajando, lo cual estaría muy bien si es que las principales motivaciones son seguir produciendo y sentirse activo, sin embargo sabemos de muchos casos donde prima la necesidad, donde la persona no pudo alcanzar una pensión o la pensión que recibiría no le alcanzará para llevar el mismo nivel de vida al que estaba acostumbrado con su remuneración regular.
El problema radica en que recién nos percatarnos de nuestra jubilación cuando se está muy cerca del retiro, justo cuando ya no se tiene el tiempo suficiente para poder generar otros ingresos que puedan ayudar a vivir sin seguir trabajando; hecho que indudablemente nos llevará a la premisa inicial; hay que seguir trabajando para mantener el mismo nivel de vida al que nos hemos acostumbrado.
Pero, ¿Por qué pasa eso?
En realidad es bastante simple de analizar, en nuestro país solo contamos con dos tipos de sistemas previsionales, la ONP y las AFP, el primero es el sistema estatal y el segundo es el privado.
Hoy hablaremos del sistema privado y tomaremos como ejemplo el caso de Gabriel, una persona que actualmente percibe S/ 3,000.00 soles y por lo tanto aporta 300 soles mensuales de acuerdo a ley (10% de su remuneración) y que al momento de jubilarse si mantiene ese mismo sueldo, lo más probable es que su pensión no supere los S/ 1,000.00 soles; monto bastante bajo si lo comparamos con su sueldo; sin embargo al analizarlo veremos que su aporte del 10% se convierte en una pensión del 30%, es decir su dinero creció y eso no suena mal, pero no es suficiente.
La mejor herramienta que se tiene cuando se está entre los 20 o 25 años es el “tiempo” pues se tendrá la oportunidad de ahorrar por 40 años para generar una propia pensión para complementar la que nuestro sistema previsional nos brinde. Cuidado, no significa ni es sinónimo que no creamos en el sistema previsional, sino todo lo contrario, es prever el ayudarnos ahora para vivir mejor cuando más lo necesitamos.
Pensar en temas de jubilación debe ser lo primero que nos planteemos cuando empezamos nuestra vida laboral, más aun si sabemos que no será suficiente nuestra pensión. Una de las mejores alternativas puede ser empezar a generar nuestras propias inversiones o nuestro ahorro previsional personal; Debemos empezar a ahorrar un sol diario, luego dos o tres conforme nuestros ingresos vayan aumentando, la idea es generar esa cultura de ahorro que luego nos ayude a poder invertir y tener esos ingresos adicionales que tanto se necesitan cuando uno se retira laboralmente.