Gainsharing: Ganamos todos
Por: Dr. Enrique Louffat. Profesor Principal de ESAN Graduate School of Business
El gainsharing es un sistema de retribución colectiva que tiene como objetivo principal incrementar la productividad mediante la mejora de los incentivos dirigidos a toda la plantilla. De este modo, se premia a los trabajadores cuando logran cumplir, en conjunto con la empresa, los objetivos establecidos.
Sus principios básicos son:
- Participación de los empleados: aportando sugerencias, contribuyendo en las mejoras e involucrándose en la toma de decisiones.
- Igualdad: garantizando que los beneficios se distribuyan de manera equitativa entre todos.
- Compromiso: fomentando la responsabilidad y el involucramiento activo de cada trabajador en el proyecto.
- Sentimiento de pertenencia: motivando a los colaboradores a “vestir la camiseta” e integrarse plenamente con la empresa.
Básicamente, el gainsharing se fundamenta en una medida histórica con métricas preferentemente operativas, sobre la cual se busca una mejora de forma simple, clara, efectiva y transparente, en plazos que pueden ser mensuales, trimestrales o incluso anuales. Algunos ejemplos de estas métricas son: optimizar el uso de recursos y costos, incrementar las unidades vendidas o reducir quejas y reclamos. De esta manera, las ganancias generadas por dichas mejoras se autofinancian y se distribuyen entre los propios trabajadores.
Principales modelos de gainsharing
- Scanlon Plan: fomenta la participación de los trabajadores mediante sugerencias o ideas para mejorar los procesos. Cuando se implementan mejoras y estas generan excedentes de ganancia, estos se distribuyen entre los empleados participantes. Ejemplo: en una clínica, el personal propone mejoras para reducir errores en los registros médicos del sistema, lo que genera ahorros que luego se comparten con los trabajadores.
- Plan Rucker: evalúa la relación entre el valor de la producción y el costo total de la mano de obra. A mayores ahorros en costos productivos, mayor será el excedente distribuido entre los trabajadores. Ejemplo: en un área de proyectos de TI, el equipo recibe bonos por entregar proyectos antes de la fecha establecida, sin errores críticos y con aprobación del cliente.
- Improshare: se centra en el factor tiempo. Si se produce más en menos tiempo, el ahorro obtenido se comparte entre los integrantes del equipo. Ejemplo: en una planta industrial, se reduce el tiempo de ensamblaje por unidad y los ahorros generados se distribuyen entre los trabajadores.
Las principales ventajas de aplicar gainsharing son:
Para el trabajador:
- Eleva la motivación y compromiso de los empleados.
- Incentiva el mejor desempeño y productividad del trabajador.
- Fomenta la integración de equipos de trabajadores.
- Contribuye a la retención del talento.
Para la empresa:
- Genera una cultura de rendimientos óptimos y calidad.
- Produce ahorros, pues el sistema se autofinancia, no hay partidas presupuestales adicionales o extras.
- Se mejora la rentabilidad organizacional.
- Impacta en la marca empleadora.
- Integra empresa y trabajador, alineando intereses comunes.
Algunas desventajas que pueden surgir son:
- Puede casuar estrés, ansiedad y problemas internos, por logar el objetivo establecido.
- No se premia el esfuerzo competitivo individual, “no todos son iguales”.
- Hay áreas donde es más difícil plantear métricas o mediciones objetivas.
- Pueden ser considerados como “derecho adquirido” y exigir su realización permanentemente.
- Rivalidad entre equipos y/o áreas si hay métricas y cálculos muy disímiles entre ellos.
Es importante señalar que el gainsharing no es lo mismo que la distribución de utilidades, la cual se realiza por mandato legal. Algunos elementos diferenciadores son los siguientes:
- Origen: el gainsharing surge por iniciativa interna y voluntaria de la empresa, mientras que la distribución de utilidades está regulada por la ley.
- Criterio de distribución: el gainsharing reparte las mejoras en indicadores operativos como costos, tiempos o calidad; en cambio, la distribución de utilidades se basa en las ganancias o dividendos de la empresa como un todo.
- Periodicidad: el gainsharing puede aplicarse en periodos semanales, quincenales, mensuales, trimestrales, entre otros; la distribución de utilidades, en cambio, se realiza anualmente de acuerdo con los periodos fiscales establecidos.
- Alcance: el gainsharing suele organizarse por equipos, áreas o proyectos específicos; la distribución de utilidades abarca a todos los trabajadores de la empresa que cumplan los requisitos legales.
Principales etapas a tener en cuenta en un proceso de gainsharing:
- Definir la variable de medición: determinar si el objetivo será reducir tiempos, disminuir costos, aumentar la producción u otro indicador clave de desempeño.
- Determinar quiénes participarán: establecer si el programa involucrará a uno o varios equipos, o a una o varias áreas de la organización.
- Establecer indicadores de rendimiento: los indicadores deben ser específicos, medibles, alcanzables, consistentes, claros y relevantes para los objetivos planteados.
- Diseñar la fórmula de cálculo y distribución de los bonos: definir los criterios de asignación (porcentajes, promedios, escalas, etc.) que permitirán repartir los beneficios entre los participantes.
- Definir la frecuencia de pago: precisar si la distribución de los bonos se realizará de forma mensual, trimestral, semestral u otra periodicidad.
- Comunicar de forma clara y oportuna: garantizar una comunicación transparente, orientadora y ágil con todo el personal involucrado, para asegurar comprensión y compromiso.
- Monitorear y evaluar el proceso: implementar mecanismos de seguimiento y evaluación continua para identificar oportunidades de mejora y asegurar la sostenibilidad del sistema.

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