Oro 2024-2025: Un Activo en Auge Frente a la Incertidumbre Mundial
En un escenario mundial marcado por la incertidumbre económica, el oro resurge, recordándonos su valor histórico como refugio seguro desde Bretton Woods. Tras superar los $1,700 en 2022, el precio del oro aumentó más del 9% en 2023, y solo en el primer trimestre de 2024, ha visto un ascenso adicional del 9%. Con las tasas de interés de la FED fijas en 5.5% y sin señales claras de recortes a la vista, sumado a las significativas adquisiciones de oro por bancos centrales, especialmente por China, y las persistentes tensiones geopolíticas, la proyección para el precio del oro parece prometedora para el resto de 2024 y el 2025.
Como principal market mover del precio del oro en este contexto encontramos al recorte de tasas por parte de la FED. La anticipación de una política monetaria más relajada por parte de la Reserva Federal de EE.UU. y otros bancos centrales clave, incluyendo el potencial de tres recortes de tasas de interés en 2024, que según el consenso iniciaría en junio, establece una base firme para un entorno favorable al oro. Con la herramienta CME FedWatch señalando una probabilidad cercana al 70% de un recorte en junio, y las acciones recientes como el recorte de tasas del 0,25% por el Banco Nacional Suizo dejando su tasa en 1.50%, lo cual se evidencia un movimiento global hacia tasas más bajas. Este escenario reduce el costo de oportunidad de invertir en oro, un activo sin ingresos corrientes, haciéndolo más atractivo frente a alternativas que generan interés. La correlación históricamente inversa entre los precios del oro y las tasas de interés sugiere que podría superar los $2,300 la onza antes de fin de año, reforzado por una postura moderada de los bancos centrales y las expectativas de mercado, según analistas de Goldman Sachs.
Si bien la expectativa sobre la decisión de la FED en el recorte de tasas es el principal driver del movimiento del precio del metal dorado, es imposible obviar la influencia significativa de las tensiones geopolíticas en el precio del oro. Esto se evidencia a través de una creciente demanda de este metal precioso como activo refugio seguro, especialmente en estos contextos de incertidumbre política y económica global. Los conflictos de Ucrania-Rusia e Israel-Hamás, junto con las compras récord de oro por parte de los bancos centrales de Asia, Medio Oriente y Europa del Este, que alcanzaron aproximadamente 800 toneladas de enero a septiembre de 2023, reflejan una fuerte tendencia de valorización del oro. Este comportamiento se atribuye a la búsqueda de estabilidad financiera ante posibles colapsos monetarios y a la diversificación de reservas frente a un panorama global inestable. La situación en Irán, siendo un comprador clave de oro y un país con potenciales conflictos geopolíticos, podría añadir más impulso al aumento del precio del oro, evidenciando cómo la geopolítica es un motor crucial detrás de la subida del precio del oro.
A propósito del entorno marcado por la incertidumbre geopolítica, es evidente que la demanda de oro como refugio por parte de los bancos centrales se incremente. Este nuevo interés esconde un cambio estratégico en la gestión de reservas a nivel mundial, orientándose hacia la diversificación y la protección ante la volatilidad monetaria. Goldman Sachs anticipa un aumento del 15% en el rendimiento de las materias primas, destacando el oro por su rol defensivo frente a las fluctuaciones del dólar estadounidense. Esta tendencia se ve reforzada por el Banco Popular de China, que ha incrementado sus reservas de oro por decimosexto mes consecutivo, alcanzando aproximadamente 72,58 millones de onzas. La adquisición récord de más de 2.100 toneladas de oro por parte de los bancos centrales en los últimos dos años subraya un consenso global sobre el valor del oro como un activo de refugio seguro. Este comportamiento refleja no solo una respuesta a la incertidumbre económica y monetaria, sino también un reconocimiento del oro como un pilar de estabilidad y confianza en el sistema financiero internacional.
Estos tres factores fundamentales proyectan un panorama optimista para el precio del oro en 2024 y más allá. La expectativa de un entorno favorable se sustenta en las políticas monetarias conservadoras de la FED, junto con el difícil contexto macroeconómico y geopolítico global, impulsando así un pronóstico alcista para el valor del oro.
Gráfico 1.
Actualmente el precio del oro se encuentra en máximos históricos y por la teoría de ondas de Elliott Wave lo encontramos en una onda 3 d 3) de mayor grado. Por ello creemos que mínimamente en el corto o mediano plazo debería alcanzar la zona de $2500 la onza.
Gráfico 2.
Sin embargo, en el corto plazo bajo la teoría de ondas de Elliott Wave, podría darse algún ajuste en onda iv. De darse ese escenario, la oportunidad de compra sería realmente importante. Consideramos que el camino está marcado a continuar realizando máximos históricos y superar los $2275 e ir a los $2500.