El Directorio y su carrera de relevos 4x100
En los eventos de atletismo, el último tramo de una carrera de postas 4 por 100 puede ser decisivo para que el equipo gane o pierda la competencia. De manera similar, empresarialmente estamos empezando el último tramo, es decir, el cuarto trimestre del año. Así, hemos recibido el testimonio que contiene una carga importante de los resultados que equivale al 75% del recorrido anual; entonces, estamos a la espera de un buen último tranco que decida el resultado final del ejercicio y qué mejor si está alineado con la estrategia y presupuesto predefinidos para el año 2023.
Para muchas empresas, este cuarto tramo es el periodo más importante para lograr los resultados planificados que, en stricto sensu, fueron definidos en función a las expectativas de los accionistas, los cuales se tradujeron en lineamientos del directorio hacia la gerencia general.
De acuerdo con las mejores prácticas de gobierno corporativo, así como nuestra ley general de sociedades, en particular: “Los directores responden, ilimitada y solidariamente, ante la sociedad, los accionistas y los terceros por los daños y perjuicios que causen por los acuerdos o actos contrarios a la ley, al estatuto o por los realizados con dolo, abuso de facultades o negligencia grave. Es responsabilidad del directorio el cumplimiento de los acuerdos de la junta general, salvo que esta disponga algo distinto para determinados casos particulares. Los directores son asimismo solidariamente responsables con los directores que los hayan precedido por las irregularidades que éstos hubieran cometido si, conociéndolas, no las denunciaren por escrito a la junta general”.
En ese sentido, el directorio debe administrarse en el plano estratégico de los negocios, lo cual le demanda una visión que va más allá del corto plazo, pero pese a que al mismo tiempo abarca el mediano y largo plazo, no le exime a este órgano colegiado estar vinculado al momento presente de la organización. Por ello, en este último trimestre del año es fundamental su participación en el análisis y comprensión de los eventos que podrían afectar los objetivos estratégicos que se reflejaron en las propuestas realizadas de y hacia los accionistas para tomar las decisiones y medidas correctivas de acuerdo con las circunstancias; considerando que en tres meses no se podrán necesariamente revertir situaciones no previstas en los anteriores nueve.
Así, en este último tramo le corresponde al directorio una actitud mucho más sagaz y aguda en los siguientes aspectos:La identificación de los puntos ciegos o áreas estratégicas que la línea ejecutiva pueda necesitar, replantear o reforzar
- La identificación de los puntos ciegos o áreas estratégicas que la línea ejecutiva pueda necesitar, replantear o reforzar
- Incrementar la colaboración entre la primera, segunda o tercera línea para mejorar la eficiencia y efectividad
- Indagar o evaluar sobre los riesgos o tópicos que puedan afectar a la organización
Todo esto deberá realizarse en aras de lograr el objetivo común de la organización y de sus grupos de interés, lo cual permitirá la anhelada sostenibilidad en términos ambientales, sociales y de gobernanza; que, en términos cuantitativos, se reflejan principalmente en los presupuestos anuales y en los reportes de sostenibilidad. En este contexto, no hay que perder de vista que la función primordial del directorio es la de supervisar y monitorear la gestión de la organización, liderada por la gerencia general; por lo cual debe evitarse caer en la tentación del denominado micro-management o comenzar a cruzar líneas de gestión instruyendo directamente a la primera, segunda o tercera línea de la organización.
Hoy, en este mundo globalizado y con permanentes riesgos emergentes, las empresas viven en un contexto de vigilia continua. Si dejamos completamente de lado la pandemia, las organizaciones siguen enfrentándose a perturbaciones externas debido a la inestabilidad geopolítica, los ciberataques, el cambio climático, los órganos reguladores y supervisores cada vez más demandantes, así como los desafíos de la cadena de suministros, entre otros temas relevantes.
Por otro lado, las interrupciones internas generadas por una gran cantidad de deuda tecnológica -que la pandemia nos obligó a reconocer-, la pérdida de empleados con conocimiento institucional, el cambio de modelos de negocios, la insatisfacción de los clientes, etc., demandan muchos esfuerzos y recursos, por lo que ya no se puede abordar la resiliencia como un programa de cumplimiento de nivel medio, sino que es necesario liderarlo desde más arriba, es decir desde el directorio -tone at the-top-, que constituye, relativamente, un nuevo y gran desafío para este.
Para lograrlo, los directorios, como parte de su responsabilidad de autogestión, constituyen comités especializados, tales como los que se mencionan a continuación, cuya mejor práctica indica que están idealmente conformados y presididos por directores independientes:
- Comité de auditoría: supervisión de los aspectos de riesgos, controles, cumplimiento normativo e información financiera
- Comité de nominaciones: asegurar la actividad y responsabilidad de los directores
- Comité de remuneraciones: aprobación de las compensaciones de la alta gerencia
- Comité de innovación y transformación digital: visión de futuro organizacional
Este año no se presenta fácil en el ámbito local, regional ni global. El PBI para el año 2023 se estima que será alrededor del 1%; el nivel de impacto es fuerte en diferentes frentes, pero al final siempre seremos testigos de excepción de empresas o personas que, a pesar de las muchas dificultades y la permacrisis, destacaron y terminaron exitosamente el año recorriendo el mismo camino de todos. Por ello, tratemos, en este universo tecnológico que nos toca transitar, de hacernos un selfie empresarial con nuestra organización en primer plano junto con las otras empresas que también lograron su propia meta.
Finalmente, no olvidemos que, en aras de los deberes de debida diligencia y lealtad, que son inherentes a los miembros de un directorio en pleno, este último trimestre también viene con la responsabilidad de consolidar lo recorrido y aprendido para delinear los principales aspectos e indicadores que deben considerarse en la preparación del presupuesto del próximo año por parte de la gerencia general y lograr el compromiso de toda la organización en su conjunto.
“Los obstáculos son esas cosas horribles que ves cuando apartas la vista de tu meta” (Henry Ford).