Momento de definiciones 01.05.18
El gobierno ya cumplió su primer mes .Y aunque todavía no se le puede juzgar , sí podemos señalar el principal aspecto positivo y negativo observado hasta el momento.
En el primer caso, Martin Vizcarra el inicio precisó que la lucha contra la corrupción tendría la más elevada prioridad. Ha decidido liderar dicha lucha, ha invitado al empresariado a unirse a este esfuerzo y ha empezado a anunciar algunas medidas al respecto. Además esta iniciativa puede resultarle “más rentable” que otras reformas (por ejemplo las de educación y salud) , ya que es una medida popular; demanda menos recursos y las resistencias que enfrentará serían menores. Ya que en este caso los grupos afectados no se atreverían a efectuar presiones públicas en contra. En relación a los aspectos negativos, hay uno particularmente importante: el excesivo afán del gobierno de evitar confrontaciones. Y ese camino puede estar afectando la reducida institucionalidad existente (la de la Sunass, en conflicto sobre el incremento de las tarifas de agua en Moquegua) ; la estabilidad de las reglas del juego (caso de los peajes), y sobre todo emitiendo un peligroso mensaje de debilidad que puede terminar siendo muy costoso. En este sentido el PCM Villanueva ha emitido un par de declaraciones preocupantes: “El Gobierno nunca va a imponer una situación que la población no quiere”(I) al referirse a las protestas de los pescadores para anular las recientes concesiones petroleras en Piura. Y otra referida a que el Ejecutivo revisará las exoneraciones tributarias, “pero sin que genere un disloque con lo que se viene haciendo” (II). Sorprendentemente las respuestas más duras no han venido de la oposición, sino del oficialismo. Es así que el MEF Tuesta, al opinar sobre la revisión de los contratos de las concesiones viales, mencionó “ no se pueden estar revisando contratos porque se requiere predictibilidad” (III). La otra respuesta, más dura, vino de Carlos Bruce, quien mencionó “ es imposible gobernar complaciendo a todos”. Y “si uno busca complacer a todos , entonces no va a poder hacer nada”. A lo que habría que agregar que si persiste en esta actitud, el Ejecutivo no avanzará en el cumplimiento de sus ofrecimientos. Y la paciencia de la población se está agotando y exigirá resultados a corto plazo. Además este gobierno no tiene la excusa de estar enfrentando a un Congreso que no lo deja trabajar, sino todo lo contrario (hasta el momento). Por lo que se debería de persistir en los aspectos positivos y rectificar rumbos en los negativos. Todavía está a tiempo.
(I y III)Gestión 30.04.18 (II) G 19.04.18