¿Burbuja en el Oro? Poco probable…por ahora
Recientemente el oro (XAUUSD) superó el nivel de los 3,000 dólares la onza, un nivel que en meses anteriores habíamos fijado como precio objetivo.
¿Por qué seguiría subiendo?
Entonces, ¿por qué seguirá subiendo el oro? En primer lugar, es probable que el oro siga subiendo gracias a la oleada de compras de los bancos centrales. En los últimos meses, las compras netas de oro de los bancos centrales han superado con creces las ventas netas de oro, como se puede observar en el diagrama a continuación.
Los bancos centrales están aumentando sus reservas de oro para reducir la incertidumbre económica. Los precios del oro suelen dispararse cuando hay crisis políticas y económicas.
Otra razón para esperar un oro alcista en los próximos meses es que la inflación se mantiene controlada en Estados Unidos, como sabemos, una inflación controlada podría permitir a la Reserva Federal continuar los recortes de tasas, e históricamente, los precios del oro suben cuando los fondos federales caen, lo que respalda una visión alcista sobre el oro. Pero hay otros escenarios que me hacen optimista.
Entre las razones adicionales para el alza del oro se encuentran, las guerras, las sanciones, las guerras comerciales y otros riesgos geopolíticos que podrían prevalecer en el futuro. El conflicto en Ucrania no ha terminado. Además, las tensiones en Oriente Medio no han terminado por completo. Obviamente, todos estos factores refuerzan el atractivo del oro como activo refugio.
Luego, pero no menos importante, está la creciente deuda mundial y la posibilidad de que disminuyan los tipos de interés.
La deuda pública estadounidense, por ejemplo, asciende a aproximadamente 37 billones de dólares, mientras que los pasivos no financiados del país ascienden a 190 billones de dólares. El ratio deuda/PIB de Estados Unidos supera el 120 %. Obviamente, Estados Unidos no es el único país altamente endeudado. El ratio deuda/PIB de Japón alcanza un asombroso 251,9 %. Entre los países europeos, Italia es uno de los más endeudados, con un ratio deuda/PIB del 143,20 %. Para atender estas elevadas deudas públicas, es necesario imprimir más dinero, lo que devalúa aún más las monedas fiduciarias. En esta situación, el oro es un activo muy valioso que puede ayudar a proteger los ahorros de la inflación.
La recesión como catalizador
Es interesante observar que, en menos de un mes, el mercado bursátil estadounidense ha pasado de un escenario con las acciones en máximos históricos a expectativas de recesión. Varios participantes del mercado han recortado sus proyecciones de crecimiento.
Todo este temor a la recesión se debe a los aranceles que la administración Trump está imponiendo a países como México, Canadá, China, la UE y otros. El propio presidente Trump ya ha advertido al público sobre ciertas dificultades económicas. A pesar de ello, la inflación se situó por debajo de las expectativas en febrero.
Si se da un escenario de inflación controlada y recesión, la Reserva Federal estará lista de nuevo para recortar los tipos de interés. Y este es un escenario favorable para el oro como hemos mencionado antes.
Fuente: Tradingview
Desde el punto de vista técnico, no hay mucho que decir, el precio se encuentra en niveles de máximos históricos, aquí el análisis grafico poco aporta. Si seria muy normal que veamos correcciones importantes en algún momento de los próximos meses, pero sin perder su tendencia alcista de fondo. Creemos que solo una caída por debajo de los 2,500 dólares haría cambiar la tendencia de alcista a bajista.
¿Riesgos?
Si buscas opiniones de expertos, la mayoría de analistas recomienda comprar oro, aunque eso puede ser positivo, en ocasiones puede terminar siendo la espada de Damocles. Existe algo que se llama la Teoría de la opinión contraria, ésta definida por primera vez por Humphrey Neill en su libro de 1954, “El arte de pensar contrariamente”, pero esto ya se conocía desde mucho antes. Por ejemplo, en el libro de Edwin Lefevre, Reminiscencias de un operador bursátil, escrito hace más de 100 años, se encuentra la afirmación: “Siempre compre cuando se haya instalado la desmoralización total”.
La explicación habitual de por qué funciona la teoría es la siguiente: si todos son optimistas, los inversores ya han comprado, por lo que, incluso con más buenas noticias, quedan pocos compradores que impulsen los precios al alza y llegará un momento en el que no aparezcan nuevos compradores. El avance está “agotado”, por lo que una pequeña toma de ganancias revertirá la situación y hará que los precios bajen.
Esta situación debería darse con el oro en algún momento del 2025.
Conclusiones
El oro finalmente alcanzó los 3,000 en medio de los temores por el impacto de los aranceles de la administración Trump en la economía global. Sin embargo, es importante destacar que es probable que el aumento de precios no se detenga allí.
Nuevas variables han entrado en la ecuación, como la mejora de la inflación en enero, la posibilidad de una recesión y la devaluación del dólar. Todo esto está impulsando el precio del oro al alza, ya que amplifica el riesgo en el escenario económico.