Las Opciones financieras
El contrato de Aristóteles y Tales de Mileto.
Un relato antiguo sobre las obras de Aristóteles, habla acerca de la gran fama que tenía este filósofo y científico griego, sin embargo, a pesar de ser un gran pensador de la época y dominar con maestría la astronomía, la gente se preguntaba por qué alguien tan inteligente como él no había podido sobresalir de manera económica en la antigua Grecia. Del otro lado se encontraba Tales de Mileto, que aprovechándose de futuros cambios climatológicos que el pronosticaba, decidió pactar de antemano con Aristóteles la compra de campos de arroz a una fecha futura y a un precio fijo, con lo cual, cuando el precio de este grano se disparó meses después él pudo adquirir dichos campos a un precio fijo de antemano (mucho menor al nuevo precio actual). Sea o no completamente cierto este acontecimiento, podemos darnos cuenta como desde épocas antiguas las personas utilizaban contratos futuros pactados de antemano para asegurar el precio de compra o de venta de un determinado bien. Esto no es otra cosa que lo que conocemos hoy como contratos derivados.
Ya entrando un poco más al ámbito financiero, los derivados, son básicamente contratos entre dos partes en la cual se estipula un precio fijo, ya sea de compra o de venta, para un determinado activo financiero en un plazo determinado y bajo unas condiciones determinadas.
Hoy explicare lo que son las Opciones. estas no son solo un compromiso que tienen ambas partes de comprar o vender en un plazo futuro estipulado, sino que el que compra una opción, siempre podrá elegir, cuando llegue la fecha de vencimiento, si es que desea o no ejecutar la opción. Por el contrario, la contraparte siempre estará en la obligación de respetar la decisión del tenedor de la opción.
Puede que en este instante se estarán preguntando: entonces, ¿Por qué alguien estaría obligado a respetar lo que el tenedor de la opción decida? Simple, porque cuando uno adquiere una opción, debe pagar a la contraparte una suma de dinero por tener dicha opción, esta se conoce como “prima”.
Para dejarlo un poco más claro, analicémoslo con un ejemplo. Imagínese que Ud. recibirá dinero de una herencia en 1 año y desea comprar acciones de Apple Inc. Suponga, también, que Ud. cree que la acción puede subir mucho de precio debido a los próximos lanzamientos y quiere cubrir ese riesgo adquiriendo una opción de compra. Para esto, Ud. debería encontrar a alguna persona (contraparte) que tenga perspectivas bajistas para la acción de Apple y así, ambos fijarían un precio de US$ 100. Es decir, dentro de un año, Ud. tendrá la opción de comprar la acción a 100 dolares y la contraparte se comprometería a vendérsela en ese mismo precio. El último paso sería pagarle a su contraparte una prima de quizás 5 dólares por comprar la opción y el contrato estaría terminado.
Sin embargo, pasado el año, Ud. ve que por alguna razón la acción de Apple cayó a 90 dólares y ya no le es conveniente comprarle la acción a US$ 100 a su contraparte, sino que es preferible no ejecutar la opción y comprar la acción en el precio de mercado. En cuyo caso perdió 5 dólares de la prima, pero no perdió 10 dólares. En otro escenario, si el precio de la acción se hubiese disparado hasta los US$ 130, Ud. sí habría ejecutado la opción y habría comprado Apple en US$ 100, lo que le hubiese generado un beneficio de US$ 25 (US$ 30 – prima US$5).
Como ve la opción se diferencia de los contratos futuros ya que nos dan la potestad de elegir entre comprar o vender en el plazo estipulado, según las condiciones de mercado y lo que nos sea más favorable a cambio de pagar una prima.
Ahora revisemos como podemos valorizar de manera sencilla de los diferentes tipos de opciones en la fecha de vencimiento. Veamos, si yo compre una opción de compra sobre una acción, y a la fecha de vencimiento el precio de mercado de la acción es superior al precio pactado, yo me estaré beneficiando ya que puedo comprar la acción más barato. Por el contrario, la contraparte estará en la obligación de venderme la acción al precio estipulado aunque en el mercado el precio de la acción se encuentre muy alto.
Opción de Compra: (Precio de Mercado – Precio Pactado), es decir ganamos si el precio de mercado es superior al precio pactado, pues podemos comprar más barato.
Sucede lo contrario si yo compro una opción de venta, en la cual yo me beneficio si es que el precio de la acción cae al vencimiento, ya que podré vender dicha acción a un precio mucho mayor que el de mercado. Como siempre, la contraparte que tiene la obligación de comprarme la acción un precio alto, aunque en el mercado se encuentre cotizando mucho más bajo.
Opción de Venta: (Precio Pactado – Precio de Mercado), es decir ganamos si el precio de mercado es inferior al precio pactado, pues podemos vender más caro.
Ahora, las opciones, al igual que los Futuros y Forwards, pueden cotizar en mercados organizados o estructurados como la Chicago Board of Trade (CBOT) donde cada contrato de opciones ya tiene un monto, precio y plazo fijo y donde en teoría no debería existir riesgo de que tu contraparte incumpla su promesa de pago. Por otro lado, las opciones también pueden cotizar en mercados Over The Counter (OTC) es decir mercados que no se encuentran regulados, pero en el que el beneficio está en que estos contratos están hechos a la medida de nuestras necesidades, con los montos , el precio y el plazo que nosotros fijemos directamente con la contraparte, es decir sin intermediarios.
¿Para qué se pueden utilizar las opciones?
En primer lugar, se encuentran los inversionistas, traders o especuladores que solo quieren beneficiarse de los movimientos de la cotización de un activo financiero, es decir, utilizan las opciones para ganar dinero según la visión que tengan sobre algún activo financiero. El segundo grupo de personas que utiliza las opciones son las que quieren cubrir riesgos, como por ejemplo préstamos, pagos o compras pactadas para una fecha, proteger sus inversiones, entre otros tipos de necesidades. El mundo de las opciones presenta una enorme gama de posibilidades, aunque existen personas que creen que son instrumentos demasiado complejos y que presentan altos costos, no podemos negar que pueden ofrecernos mayor certeza en los flujos que recibiremos sin importar si son épocas de exuberancia o crisis económica.