¿Aprender a invertir inteligentemente? (Parte 2)
En un artículo anterior expliqué las dos corrientes más importantes de los inversionistas inteligentes: Value investing y Growth investing.
Existe mucha bibliografía sobre los value investing, por ello me centrare hoy en los growth investing. Los seguidores de esta corriente buscan invertir en acciones con buen potencial de crecimiento, aunque dichos papeles puedan presentar características de sobrecompra inclusive. Por ejemplo, los growth investors identificaron un enorme potencial de crecimiento en las acciones tecnológicas o vinculadas al internet en la década de 1990 y fueron ellos quienes aprovecharon la enorme subida de precios que se gestó por aquella época (antes de la crisis punto com).
Así mismo, y en casos más recientes han sido ellos quienes apostaron por el potencial crecimiento que tuvieron los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), posteriormente apostaron por países aún más pequeños como los latinoamericanos, quienes de desempeñaron excepcionalmente luego de la denominada crisis “subprime” en EE.UU. Pero desarrollar estrategias de inversión como estas representa un mayor potencial de riesgo (y por ende de ganancias) que la mayor parte de inversiones.
Existen inversionistas que apuestan no solo por economías enteras, sino por acciones pequeñas de gran potencial utilizando capitales de riesgo, las denominadas “small cap stocks” (acciones con pequeña capitalización bursátil). Para ser más concreto, tomemos el ejemplo de capitales de riesgo como Sequoia Capital, una empresa que en los últimos años viene apostando por emprendimientos con mucho potencial de crecimiento. Una de las primeras inversiones fue Google, al apoyar con 25 millones de dólares a dos jóvenes talentos que sacaron adelante una de las más grandes empresas tecnológicas de los últimos tiempos. Sequoia Capital también realizó apuestas por Apple, Electronic Arts, Yahoo, Oracle y su más reciente apuesta fue, nada más y nada menos que Whatsapp. Pero invertir en startups no es siempre fácil, es necesario saber identificar las ventajas competitivas de estas empresas en relación al resto, identificar el segmento al que se dirigen y observar el potencial de crecimiento. En esta categoría posiblemente puedan ingresar otro tipo de inversionistas que prefieren perseguir las IPO (primeras salidas al mercado de acciones), pues les dan un mayor margen de ganancias potenciales. Inclusive los fondos de inversión hacen distinciones entre el growth investing y el value investing, denominándose a sí mismo growth funds y value funds.
En la gráfica se aprecia como las personas que se arriesgaron por Google a mediados del 2005 (un año después de su salida a bolsa) cuando cotizaba alrededor de 250 dólares, hicieron fuertes retornos dos años después cuando la acción llegó a los 700 dólares, incluso este año 2014 llegó a superar los 1200 dólares la acción ¡Sorprendente!
Como ya se mencionó, el growth investing permite a los inversionistas apostar por instrumentos que puedan estar sobrevalorados inclusive. Usando el ejemplo del ratio PER, imagine una empresa con un valor de PER de 20 veces, mientras que el S&P 500 se encuentra con un ratio promedio de 14 veces, esta empresa podría ingresar a esta categoría siempre y cuando esta tenga un alto potencial de crecimiento. Rescatamos, entonces, que para que el growth investing tenga efecto es necesario invertir en una empresa con un rendimiento potencial superior al promedio de la industria, rendimientos que crezcan no solo a un 10% anual, sino que ese 10% se incremente año tras año, solo así estaríamos compensando el elevado riesgo que tomamos por invertir en un papel quizá sobrevaluado. De otra manera, nos convendría más invertir nuestro dinero en un depósito a plazo al 5% asumiendo un riesgo considerablemente menor.
No existe una fórmula concreta para que una acción entre en la categoría de growth investing, pero podríamos fijarnos en una serie de factores que pueden darnos algunos avisos. Primero; excelentes rendimientos proyectados; segundo, aumento de los márgenes de ganancia; tercero, gran potencial de crecimiento en el mercado y, finalmente, preguntarnos ¿es posible que esta acción duplique su precio en los próximos 2 a 5 años?
Una opción Growth investing actual
Los vehículos aéreos no tripulados comúnmente conocidos como drones, tienen la capacidad de volar grandes distancias sin la necesidad de tener a nadie a bordo. La principal característica de estos vehículos es que pueden ser controlados por un operador remoto, incluso a cientos de kilómetros de distancia. Esta característica principalmente es la que ha generado mucho interés al momento de realizar reconocimiento y vigilancia para los ejércitos. El uso militar que los gobiernos le han dado ha ido desde simples misiones de entrenamiento hasta la captura y muerte de los más grandes terroristas a nivel mundial. Los drones consumen tanto energía eléctrica como hidrógeno y hasta hace poco eran estrictamente regulados y utilizados por ejércitos en todo el mundo dado el uso que se le venía dando.
En los últimos años, la utilización de drones se ha ampliado a diversas ramas en el ámbito civil, como la cartografía, la agricultura, construcción, la seguridad e incluso ha incursionado en la industria fílmica. Sin embargo, existe una fuerte regulación por parte de la Federal Aviation Administration (FAA) en Estados Unidos que es el órgano regulador del espacio aéreo norteamericano y todo lo que compete a cualquier vehículo aéreo. La FAA prohibía a estos vehículos transitar libremente por zonas pobladas, debido a su alto potencial destructivo en caso de ocurrir un desastre. A pesar de estos argumentos en contra, hace algunos meses, este organismo regulador decidió lanzar una ley que permitiría el uso de drones con fines comerciales para 2015, una buena señal para las empresas que apuestan por el desarrollo de estos vehículos.
En los dos últimos años se ha escuchado un gran interés por parte de grandes empresas que desean incursionar en la fabricación y desarrollo de drones para uso comercial. Por ejemplo, Jeff Bezos CEO de Amazon (#AMZN) manifestó que uno de los proyectos que le genera mayor interés, es el de utilizar drones para el reparto de los productos que se ofrecen a través de su plataforma. Actualmente ya ha concretado in prototipo llamado “Prime Air”, un drone con la capacidad de recoger cajas especialmente diseñadas para el reparto de productos y de viajar grandes distancias y entregarlo en la puerta de cualquier hogar. Así mismo, gigantes como Facebook, Ericsson, MediaTek, Nokia, Opera, Qualcomm y Samsung se han unido en una iniciativa denominada “Internet.org” en la cual buscan utilizar drones impulsados por energía solar capaces de mantenerse en el aire hasta por 5 años, con la finalidad de proveer internet en las zonas más alejadas del planeta. De igual manera, existen otros proyectos como el de la gigante Rolls-Royce que intentará utilizar el sistema de control remoto de los drones para manejar embarcaciones de carga. A estos proyectos se suman intentos por parte de Google de utilizar una especie de sustituto de los drones, que son los globos de helio con la misma expectativa de poder llevar internet a lugares más alejados o el uso de estos sistemas de control remoto para elaborar drones terrestres y desarrollar autos que puedan manejarse solos apoyados en inteligencia artificial.
Finalmente, el potencial de crecimiento de los drones es realmente grande y solo una ínfima porción de la fabricación se destina a usos comerciales o civiles. El desarrollo de nuevos y mejores sistemas de manejo de drones es inminente, por lo que invertir en empresas que buscan desarrollar modelos de negocio basados en estos vehículos encaja en la categoría del “Growth Investing” y puede ser una buena opción de inversión a mediano-largo plazo. Solamente, habría que mantenerse con los ojos bien abiertos respecto a los temas regulatorios y de privacidad que son el gran riesgo que presenta este sector, por lo demás, estamos posiblemente a una nueva tecnología que puede simplificar aún más nuestro estilo de vida.
Les comunico a los interesados que este jueves 24 de abril a las 10:00am realizaré una Conferencia Online Gratuita sobre “Renta variable americana, oportunidades y riesgos”, los interesados pueden registrarse al mail: clientes@forexperu.pe, indicando su nombre y teléfono para su inscripción.