Las inversiones de Lombardi

Vincent Thomas Lombardi,  nació el 11 de junio de 1913 en New York, en el seno de una familia católica, lo cual muchos comentan fue parte importante en su formación de valores aplicados en la disciplina que le permitió alcanzar tantos triunfos. Aquel joven de ascendencia italiana estudió en la Universidad de Fordham en Nueva York donde recibió la máxima distinción Cum Laude por su dedicación en todo lo que hacía; fue profesor de álgebra, física, química y latín en el Instituto Santa Cecilia en Nueva Jersey. Entrenó en el mismo instituto a los equipos de béisbol, baloncesto y por supuesto fútbol americano, para finalmente dedicarse de lleno a entrenar únicamente en este último deporte en la Universidad de Fordham donde había completado su formación académica. 

En 1959 se convirtió en entrenador en jefe del equipo que le dio gloria y su ingreso a la historia del fútbol americano: Los Green Bay Packers, un equipo que tenía 12 años de temporadas negativas. Dicen quienes jugaron bajo su mando, que Vincent Thomas Lombardi era un hombre con una personalidad imponente y sumamente estricto, el tipo de entrenador con quien ningún jugador se atrevería a discutir ni por error. “Quiero que se entienda que estoy en completo control de todo lo que suceda aquí”. Con esas palabras se presentó Lombardi al reunirse con los integrantes del Comité Ejecutivo de los Green Bay Packers  el lunes 2 de febrero de 1959 en el hotel Northland en Green Bay. Bajo las órdenes de Vince Lombardi, los Packers ganaron cinco campeonatos en siete temporadas, por ello es considerado el técnico más exitoso de la historia de la NFL.

¿Por qué hablo de un entrenador de futbol americano en un blog de inversiones?

Bueno amigo lector, si usted leyó la pequeña reseña de Vincent Lombardi habrá descubierto que el rasgo más característico de su éxito se basó en la disciplina, y en la forma como el mismo decía; estaba en completo control de todo.

En esta seguidilla de entregas que haré sobre las 5 reglas necesarias para ser un buen especulador en los mercados financieros, hoy explicaré la segunda regla: Aprender a crear reglas.

Para invertir eficientemente en los mercados financieros, necesitamos de reglas y limites que guíen nuestro comportamiento ¿Por qué? En el mundo de las inversiones existe un potencial enorme para hacernos daño a nosotros mismos. Existen inversiones en el cual el riesgo de pérdida es ilimitado. Justamente para evitar ello tenemos que crear una estructura interna, en forma de disciplina mental que nos guie para que siempre actuemos de manera tal que nos beneficie.

Piénselo bien, el mercado es como la corriente de un rio, siempre en constante movimiento, no comienza, ni espera, ni se detiene. Aun cuando los mercados están cerrados los precios siguen moviéndose. No hay reglas para el mercado y nada de lo que hacemos en la sociedad nos ha preparado para funcionar eficientemente en un entorno tan libre y sin límites. Aun los juegos azar o de mesa, tienen estructuras, reglas, un comienzo, un final. En las inversiones o en el trading ello no es posible, todo empieza cuando usted lo desee y termina cuando usted quiera. Esto significa  que una vez que usted esté perdiendo dinero en una operación, usted no tiene que hacer algo para mantener la perdida, ni siquiera estar atento, porque si usted hace caso omiso a la situación, el mercado puede tomar todo lo que usted tiene y más.

Un ejemplo: Cuando usted ha cumplido 18 años, ha estado vivo en este mundo más de 6000 días ¿Cuántas veces durante ese tiempo escucho las siguientes frases?

- No, no puedes hacer eso.

- Ahora no, déjame pensarlo.

- No tienes otra opción.

- Está prohibido.

Estas son algunas de las frases que recibimos durante nuestra vida, ello genera “impulsos negados” y se basan en necesidades interiores. ¿Qué sucede cuando entras en un entorno de libertad extrema, donde todo es permitido? Seguramente todos estos impulsos negados a lo largo de nuestra vida aflorarán, manifestándose en cierto libertinaje. ¿Por qué? Para alguien que nunca tuvo libertad absoluta en su vida enfrentarse a un entorno donde estará en libertad plena (las inversiones y el trading) puede resultar catastrófico y hasta frustrante.

Este entorno de libertad absoluta dificulta las posibilidades de éxito de los inversionistas, debido a que no están preparados mentalmente para manejar dicha libertad, por ello, es indispensable aprender a crear reglas que rijan nuestra estructura, reglas que le permitan estar en control de sí mismo, parafraseando a Vince Lombardi.

La estructura mental

Los traders o inversionistas ganadores han aprendido que es indispensable desarrollar un mecanismo mental para contrarrestar los efectos negativos de la euforia o sobreconfianza que resulta luego de una serie de operaciones o inversiones ganadoras. Para un trader, ganar  es extremadamente peligroso si no ha aprendido a crearse reglas y límites. 

Si usted tuviera que elegir entre 2 inversionistas para administrar su dinero ¿Cuál elegiría? El inversionista “A” utiliza un sistema de inversión simple, incluso quizá una técnica mediocre, pero posee una mentalidad que no lo hace dudar, ni racionalizar las pérdidas y ganancias, así como una disciplina férrea. El segundo inversionista “B” es un analista fenomenal, pero funciona con los típicos temores y miedos, sumamente terco y obstinado en sus inversiones. ¿La opción correcta es obvia no? El primer inversionista es quien va a lograr mejores resultados en el tiempo.

La actitud y el entorno mental adecuado producen en general, mejores resultados que el análisis o la técnica. Obviamente la situación ideal es tener ambas, pero quizá ello no sea necesario. Con la actitud y la disciplina adecuada invertir será un proceso satisfactorio, rentable y hasta divertido. Probablemente para varios de ustedes esto puede ser difícil de creer, especialmente si usted ha estado luchando durante años para aprender todo lo necesario del mercado y su análisis.

Los pasos para crear un entorno mental adecuado son los siguientes:

1- Identifico objetivamente mis oportunidades

2- Predefino el riesgo en cada operación

3- Acepto completamente el riesgo en cada operación y estoy dispuesto a cancelarlo si se vuelve en mi contra.

4- Actúo de acuerdo a mi sistema de inversión sin dudar y sin vacilación.

5- Continuamente controlo mi propensión a cometer errores.

6- Entiendo estos principios y por lo tanto, nunca los violo.

 

Puede parecer simple y hasta inútil, pero establecer esta estructura mental en sus inversiones y llevarlas a cabo disciplinadamente hará la diferencia entre usted y muchos otros inversionistas. ¿Habría sido Vincent Lombardi un gran inversionista? ¿Qué cree usted?