Tony Succar llega al Gran Teatro Nacional en febrero con dos Grammys bajo el brazo. El percusionista y compositor afirma que llegó el momento de que “el Perú conozca su trabajo”.
¿Cómo observa el mercado peruano? ¿Qué tan difícil es frente a otros?
Recién estoy entrando; se me ha hecho un poco más difícil que en otros países. Pensé que por ser peruano sería más fácil, pero no.
¿Cómo ve la industria discográfica con las plataformas como Spotify?
La era digital ha sido un bajón muy fuerte en cuestiones monetarias para los artistas, porque antes había muchos discos y las disqueras tenían mucho dinero para invertir en artistas nuevos. Había más estudios de grabación; uno se concentraba más en crear la música.
¿Observa algún aspecto positivo?
Ahora todo mundo tiene acceso a poder lograr sus sueños.
¿A qué se refiere?
Gracias a las redes sociales pude tener el éxito que tengo. Lo que se tiene que entender es que tal vez no vas a vender discos como antes, ni una disquera o un inversionista te va a decir “voy a aportar en ti US$ 250,000”. Con las justas te dirá: “te doy US$ 10,000 para que hagas un disco”. Pero gracias a la tecnología también puedo hacer música más barata.
¿Cómo se logra sacar un hit? ¿Cómo sabe qué es una buena canción?
No creo que haya un método para hacer un hit, sino todo el mundo lo aplicaría. Pero hay una magia que no se puede explicar cuando escuchas una canción. Es algo extraño y eso pasa en la combinación entre melodía y la letra.
Mencionó que en su caso fue difícil tocar las puertas de la radio, ¿por qué?
Los dueños de radios tienen mucha responsabilidad, así como los programadores. Pero este es un negocio. No se puede culpar a una persona, todo funciona como un sistema.
¿Hasta qué punto cree que la música peruana puede ser exportable?
Es importante crear un nuevo estilo, un nuevo sonido, nuevas canciones; marcar la diferencia. Creo que cuando empiecen a hacerlo más es cuando va a iniciarse un movimiento fuerte para salir del país y competir. Pero no es imposible, creo que va a pasar y va a pasar pronto.
¿Cree que el trabajo con marcas o con auspiciadores es importante para la autogestión del artista o cómo garantizar esa sostenibilidad?
En realidad el auspicio, el dinero, es secundario. Todo comienza por la música. Más dinero puede ser más marketing, pero puedes meterle millones de cosas, pero si la canción no es como debe ser, es tirar la plata al aire.
¿Cómo han incrementado sus presentaciones a partir de los Grammys?
Tocaba bastante en Miami. Pero ya paré de hacerlo en todas las discotecas. Me estoy dedicando mucho más a los teatros, a los festivales, cosas más masivas. Ahora iré a Puerto Rico para un festival porque no me quiero desgastar.
¿Tiene proyectos con artistas peruanos?
No los tenemos plasmados, pero sí hay algunas conversaciones con cantantes peruanos y peruanas. Ahora estoy concentrado en los dos shows que vienen. Están Daniela Darcourt y César Vega, que van a cantar en el Gran Teatro Nacional. Eso va ser nuestro primer experimento, trabajar juntos en el escenario. Pero ya hemos colaborado anteriormente.
¿Tiene un disco a la vista?
Pienso lanzarlo en abril, se llama “Raíces Jazz”. Es un disco instrumental. No busqué a grandes artistas, como lo hice con mi primer disco, pero sí hemos grabado con músicos peruanos. También viajé a Brasil, a Porto Alegre, a grabar con músicos brasileros. También grabamos en Madrid, en España, cajón, palmas y zapateo. Lo que estoy tratando es de mantener mi línea como productor y artista comercial, pero a la vez no olvidarme de mi raíz, que es el jazz. Eso es lo que estudié en la universidad y quiero mantener mi línea de hacer música intelectual.
En Corto
Reconocimiento. En 2019, Tony Succar (de 33 años) recibió el Latin Grammy en la categorías “Mejor Álbum de Salsa” y un segundo premio al “Productor del Año”. Este 18 y 19 de febrero ofrecerá dos presentaciones en el Gran Teatro Nacional.