Los relojes suizos no siempre son un lujo, asegura Oscar Ortega, propietario del Centro Relojero Suizo, quien estima que los limeños no buscan lujo a la hora de escoger sus relojes sino moda y durabilidad. Por eso, su público objetivo se ubica en la clase media, con un ticket promedio de US$ 500.
Los lujosos modelos de Modavo de más de US$ 4,000 son para un consumidor más clásico interesado en lucir su muñeca. "Estos relojes son una joya, algunos incluyen diamantes y suelen ser más pesados. Definitivamente, no son para toda ocasión", comenta Ortega.
Así, la marca Longin, con típicos relojes pequeños para mujer, similares a una pulsera, y clásicos cuadrados para el hombre, también representan una minoría en el total de ventas de la firma. El precio promedio de estos modelos de antaño superan los US$ 1,000
La moda no es lujoLejos de las piedras preciosas y los modelos clásicos de hace cincuenta años, los relojes más demandados de la tienda son los modelos que siguen los patrones de la moda dirigidos a un público juvenil, que aprecia el diseño y la durabilidad de los productos. Sus precios van desde US$ 280 hasta US$ 500.
En ese segmento, las mujeres prefieren las correas anchas, impensables en los modelos clásicos, o cambiar el cuero por cerámica y variar los tonos metálicos por colores neon. El reloj blanco es la pieza indispensable de esa colección
DeportivosEn la misma línea, fuera del segmento de lujo, el Centro Relojero Suizo presenta sus modelos deportivos dirigidos a los jóvenes interesados en la tecnología y aplicaciones adicionales del reloj.
"En la línea Quality Time de Roamer para hombres, los consumidores buscan que el reloj tenga altímetro sobre todo, quienes van a la montaña, brújula, calendario", detalla Ortega sobre estos modelos de gran tamaño.