Redacción Gestión

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Barcelona (Reuters).- El fabricante finlandés lanzó un teléfono de 15 euros (20 dólares) para mejorar su posición en el mercado de los dispositivos básicos, donde ha perdido terreno en su intento de desarrollar equipos inteligentes.

El Nokia 105, presentado en el de Barcelona y que saldrá a la venta este trimestre, es el sucesor del 1280, del que se vendieron más de 100 millones de unidades.

También presentó otro aparato de 65 euros con acceso a Internet y versiones más económicas de sus teléfonos Lumia,llenando el vacío entre sus dispositivos avanzados que funcionan con y los intermedios Asha.

La compañía finlandesa espera que los nuevos teléfonos incrementen las ventas en los mercados emergentes y muestren que se está volviendo a centrar en la gama más barata del mercado, donde consigue el grueso de sus ingresos.

"Esa es una parte clave de nuestra posición ante la competencia, particularmente en un país como China", dijo el presidente ejecutivo, , en el congreso de Barcelona.

"Hay un número muy amplio de dispositivos baratos y sin grandes diferencias. Creemos que tenemos que ofrecer una diferenciación en cada una de las gamas de precios", agregó.

La compañía tiene dificultades para competir con y en el negocio de teléfonos inteligentes, mientras que también ha perdido espacio en el segmento bajo del mercado por intentar enfocarse en los equipos avanzados.

El director de investigación de IDC Francisco Jeronimo dijo que el Nokia 105 probablemente sería el teléfono más barato del mundo de una marca importante.

"La presión está ahora sobre los vendedores chinos. ¿Por qué compraría un consumidor un teléfono chino cuando por el mismo precio puede tener una mejor calidad de una marca bien conocida?", dijo Jeronimo.

Los teléfonos Lumia se han ganado el aplauso de la industria por aspectos como su fotografía o mapas, pero las ventas se han visto superadas por las de otros dispositivos como los de Samsung, que funcionan con el software de , y el de Apple.

La participación de mercado de Nokia en el segmento de teléfonos inteligentes ha caído en cerca de un 5%, mientras que Apple y Samsung controlan conjuntamente la mitad del mercado.