La inteligencia artificial aplicada a los medios de pago ayudó a prevenir fraudes por unos US$ 2,000 millones en América Latina y el Caribe solo en el año 2019.
La cifra está contenida en un informe publicado este miércoles sobre los resultados de Visa Advanced Authorization (VAA), una de las herramientas de esta multinacional tecnológica que desde los años 90 utiliza la inteligencia artificial (AI) en su misión de hacer los pagos más seguros y fáciles.
VAA utiliza AI para analizar más de 500 atributos y así generar una puntuación de riesgo para cada transacción en aproximadamente un milisegundo.
Una herramienta para generar confianza
El objetivo es ayudar a las instituciones financieras a decidir si aprueban o deniegan la autorización para una compra, explicaron Paul Fabara y Eduardo Pérez, jefe global de riesgo de Visa y jefe regional de riesgo para América Latina y el Caribe, respectivamente, y al mismo tiempo “generar más confianza” en los pagos digitales y con dispositivos móviles a los consumidores.
"El fraude viene en muy diferentes formas, en muy diferentes sabores", dijo Fabara para explicar por qué es tan importante esta ayuda para rastrear operaciones de alto riesgo o fraudulentas y emitir "una alerta en tiempo real".
La última palabra sobre una transacción la tienen los emisores de tarjetas y Visa lo que hace es darles la capacidad para tomar la decisión de aprobarla o no con todas las de la ley, agregó Pérez.
Esto último tiene que ver con que, además de prevenir el fraude, VAA ayuda a evitar fricciones con los clientes por transacciones sin problemas reales que no son aprobadas, ya que el diagnóstico sobre el riesgo es más certero con la herramienta.
Millones de tarjetas y de transacciones
En el 2019, había en América Latina y el Caribe más de 478 millones de tarjetas y un volumen de pagos de US$ 430,000 millones. La penetración del chip y los medios de pago sin contacto es alta en la región, de ahí que "prevenir el fraude y posibilitar el crecimiento de los negocios ayuda a la región a medida que avanza hacia la transformación digital", dijo Eduardo Pérez.
A juicio de Fabara, lo importante de la inteligencia artificial es que "se aprende" en cada transacción y cuantas más se realizan, más conocimientos se tiene para atender a los clientes en algo muy importante para ellos: "detección y protección frente a los fraudes".
No obstante, subrayó, no es la única herramienta para prevenir sino parte de un conjunto de elementos variados, como lo es "el ecosistema del fraude".
A una pregunta sobre el nivel de riesgo en transacciones en línea en la red de pagos de Visa en América Latina y el Caribe, Pérez respondió que es "muy bajo" como en el resto de las regiones.
La revolución digital
Según una investigación realizada por Forrester Consulting por encargo de Visa, las empresas FinTech, los bancos y los comercios en América Latina esperan que haya un aumento en el uso de los pagos digitales debido a la adopción generalizada de dispositivos conectados.
Para apoyar las necesidades de pago de extremo a extremo de los consumidores e impulsar un mayor compromiso digital, las empresas se están enfocando en la banca móvil (57%), las billeteras móviles (50%) y los pagos entre personas (38%).
Las principales razones citadas para la adopción de nuevas tecnologías de pago incluyen una mayor conveniencia (58%) y la velocidad de las transacciones (56%).
"Seguridad y conveniencia son las máximas prioridades para los latinoamericanos, y el creciente número de consumidores digitales esperan una experiencia de pago sin fricciones", dijo Eduardo Pérez.
"El uso de la inteligencia artificial por parte de Visa está ayudando a las empresas de América Latina y de todo el mundo a mejorar la experiencia de los clientes, impulsar el crecimiento de los negocios y mitigar las amenazas de seguridad de los pagos", agregó.
Visa utiliza AI en más de 100 aplicaciones y capacidades que permiten a consumidores, minoristas e instituciones financieras de toda América Latina y el Caribe beneficiarse en cada etapa de la experiencia de la cuenta de pagos incluyendo los procesos de apertura e incorporación, autenticación y autorización.