La Junta Nacional de Justicia (JNJ) destituyó -por decisión unánime- al exfiscal de la Nación, Pedro Chávarry, con lo cual este magistrado queda imposibilitado de ejercer cualquier cargo del interior del Ministerio Público.
La máxima sanción se tomó ante las “faltas muy graves” cometidas por la exautoridad, especialmente durante su actuación en el deslacrado de una oficina intervenida por el fiscal José Domingo Pérez.
Asimismo, por haber mentido sobre la conversación que sostuvo con el exjuez César Hinostroza, encarcelado por presuntos actos de corrupción. María Zavala, integrante de la JNJ, presentó el informe final del proceso disciplinario contra Chávarry.
El documento proponía la destitución por incurrir en una falta “muy grave” al violar las conductas éticas dispuestas en la Ley de Carrera fiscal.
A Pedro Chávarry se le imputaron cargos disciplinarios “muy graves” su presunta implicancia en el caso Los Cuellos Blancos del Puerto hasta su actuación como fiscal de la Nación.
Además, se menciona como “falta muy grave” que se haya facilitado el deslacrado y retiro de bienes de la oficina de su exasesor Juan Manuel Duarte en la sede de la Fiscalía de la Nación que había sido allanada por el Equipo Especial Lava Jato.
También se declaró como “falta muy grave” de parte de Chávarry el haber convocado César Sandoval, asesor del Congreso de la República y la fiscal Farah Cubillas, para analizar la manera de afrontar el allanamiento realizado a sus despachos por parte del Equipo Especial Lava Jato.
Durante la sesión, Zavala detalló el material que se evaluó para recomendar dicha sanción. Entre ellos, videos, declaraciones de testigos, reportajes periodísticos, entre otros.
Chávarry Vallejo seguirá afrontando las investigaciones que existen en su contra en el Congreso de la República, así como en la Fiscalía.