A pocos días de las elecciones generales, la consultora global de riesgo político Eurasia Group analizó el escenario local en un contexto de elevada incertidumbre ocasionada por el COVID-19.
“La campaña electoral se desarrolla mientas el número de contagios y muertes sigue elevado, la vacunación avanza lentamente y el país atraviesa una profunda crisis económica”, comenta a gestion.pe María Luisa Piug, directora para Latinoamérica de Eurasia Group.
“Las elecciones además se van a realizar luego de varios años caracterizados por turbulencia política y escándalos de corrupción. En este contexto, no resulta sorprendente que exista un profundo descontento y las preferencias electorales estén tan fragmentadas”, agrega.
Eurasia Group considera que un candidato de tendencia izquierdista (Yonhy Lescano o Verónika Mendoza) llegaría a segunda vuelta y, de ocurrir, “podría ganar la presidencia por un margen apretado, aunque en esta caso claramente es difícil de determinar”.
“La competitividad de los candidatos que representan un cambio probablemente ha aumentado por la crisis sanitaria y económica. Sin embargo, el voto de izquierda en estas elecciones está dividido entre tres candidatos (Mendoza, Lescano y Pedro Castillo)”, indica Puig.
Para Eurasia Group, el candidato de derecha que podría resultar más competitivo en una segunda vuelta es Hernando de Soto, quien, al igual que otros del mismo lado del espectro, asegurarían la continuidad en política económica.
Congreso
María Luisa Puig comenta que es probable que las elecciones legislativas resulten en un Congreso fraccionado en el que varios partidos obtendrán representación, pero ninguno la mayoría. Incluso considera que “en el improbable caso que el partido del próximo presidente obtenga la mayoría, le será extremadamente difícil garantizar la lealtad de los congresistas”.
“Muchos candidatos se unieron a sus partidos solo para competir en las elecciones y muchos de estos grupos han surgido únicamente para esta coyuntura y es probable que enfrenten divisiones internas”, agrega.
Eurasia Group señala que un Congreso fragmentado y un presidente débil incrementará el riesgo de iniciativas populistas desde el Ejecutivo y el Parlamento
¿Vacancia?
Las crisis política de los últimos años, con disolución del Congreso y vacancia presidencial, podrían marcar la pauta para el próximo periodo.
Consultada sobre si escenarios similares ocurrirían en los próximos años, María Luisa Puig dijo: “Un Congreso fragmentado y un presidente con un mandato débil no favorecerán la estabilidad del próximo Gobierno, con el riesgo de que el próximo presidente no complete su mandado en el 2026, independientemente de quién sea elegido”.