Estambul (AFP).- Treinta y nueve personas, incluyendo numerosos extranjeros, murieron en el ataque de un asaltante disfrazado de Papá Noel contra una discoteca de Estambul este sábado en la noche en Estambul, capital de , donde cientos de personas celebraban el Año Nuevo.

Además, otras 65 personas resultaron heridas, cuatro de ellas de gravedad, después de que im asaltante abriera fuego contra la multitud que se encontraba en la sala de fiestas situada junto al Bósforo.

El ministro de Interior, Suleyman Soylu, que habló de "atentado terrorista", declaró que el atacante había escapado y que estaba siendo buscado.

"Las operaciones de búsqueda del terrorista están todavía en curso. Espero que sea capturado rápidamente", declaró.

Según él, 20 víctimas ya han sido identificadas, de las cuales 15 son extranjeras y cinco turcas. Soylu había hablado inicialmente de 16 extranjeros.

Según la cadena de televisión NTV, varias de las entre 700 y 800 personas congregadas en la discoteca se lanzaron a las gélidas aguas del Bósforo para escapar a las balas.

Este ataque marca un comienzo de año 2017 sangriento para Turquía, un país que ya se vio muy sacudido en 2016 por varios atentados mortales, atribuidos a los yihadistas del grupo (EI) o a la rebelión kurda.

Antes de entrar y de abrir fuego en este club nocturno, muy frecuentado por extranjeros y ubicado en la orilla europea de Estambul, un asaltante abatió a un policía y a un civil que se encontraban delante de la discoteca, precisó el gobernador de la ciudad, Vasip Sahin.

'Unos pisoteaban a otros'"Es un ataque terrorista", insistió Sahin en una rueda de prensa.

"De una forma salvaje e implacable, ametralló a la gente que simplemente había venido para celebrar el Año Nuevo", declaró el gobernador.

Las autoridades habían anunciado un despliegue de 17.000 policías en Estambul en el marco de los festejos del Año Nuevo. Además, precisaron que algunos policías irían disfrazados de Papá Noel para detectar la menor anomalía entre las multitudes.

"Justo en el momento en que nos instalábamos cerca de la entrada hubo mucho polvo y humo. Sonaron disparos. Al escucharlos, muchas chicas se desmayaron", dijo a la AFP el futbolista Sefa Boydas.

"Dijeron 35 o 40 muertos pero probablemente son más porque a medida que yo avanzaba, algunas personas pisoteaban a otras".

La discoteca Reina está situada a solo unos cientos de metros del lugar en el que tenían lugar las celebraciones oficiales de Año Nuevo, a orillas del Bósforo.

Algunos testigos afirmaron que habían oído a los asaltantes gritar algo en árabe, según la agencia de prensa Dogan.

Videos publicados en redes sociales mostraban a un hombre irrumpiendo ante la entrada del club y disparando, sembrando el pánico entre las personas allí reunidas.

Equipos de las fuerzas especiales registraron el local, mientras que numerosos policías y ambulancias se encontraban frente al establecimiento, según periodistas de la AFP.

La Casa Blanca condenó un ataque "horrible". "Esta atrocidad contra gente inocente que estaba de fiesta (…) subraya la brutalidad de los atacantes", dijo el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, Ned Price.

'Comienzo de 2017 trágico'El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, lamentó en Twitter un "comienzo [de año] 2017 trágico con un ataque en Estambul".

Por su parte, la embajada estadounidense advirtió a los ciudadanos de que los grupos extremistas continúan con sus "esfuerzos agresivos de realizar ataques en áreas donde los ciudadanos estadounidenses y expatriados viven o visitan".

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan estaba presente en Estambul por el Año Nuevo.

Turquía ha sido objeto de varios ataques vinculados con la rebelión separatista del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) o atribuidos al grupo EI que han golpeado especialmente Estambul y Ankara.

El 10 de diciembre, un atentado reivindicado por un grupo radical kurdo dejó 45 muertos incluyendo una mayoría de policías en el centro de Estambul.

También en Estambul, cuatro turistas perdieron la vida y 36 personas resultaron heridas en marzo en la famosa avenida Istiklal, en un atentado suicida reivindicado por el grupo EI.

Las autoridades también afirmaron que los yihadistas estaban detrás de un atentado que dejó 47 muertos el pasado junio en el aeropuerto Atatürk de Estambul.

Miembro de la coalición internacional que combate al grupo EI en Siria e Irak, Turquía inició en agosto una ofensiva en el norte de Siria para repeler a los yihadistas y empujarlos hacia el sur.

Rebeldes sirios apoyados por el ejército turco asedian desde hace varias semanas la ciudad de Al Bab, un feudo del EI en el norte de Siria.

En respuesta a estas operaciones militares, el EI ha amenazado en varias ocasiones con atentar contra Turquía.