Annalucia Fasson Llosa
Socia del área corporativa y jefe del área de derecho corporativo de Muñiz, Olaya, Meléndez, Castro, Ono & Herrera Abogados.
Año nuevo, estrategia nueva y es así que los centros comerciales deben diferenciarse cada vez más de su competencia y atraer mayor flujo de público. Ya no basta con solo considerar los factores típicos de éxito, tales como ubicación y acceso, infraestructura, estacionamientos y diversidad de marcas, sino que los consumidores ahora son más exigentes y requieren de la inmediatez en la adquisición de sus productos, pues prefieren adquirirlos vía online, ya sea por falta de tiempo en su trabajo o por preferir hacerlo desde la comodidad de su casa; por lo tanto, es un hecho que los centros comerciales se convertirán en un centro de experiencia.
Ante esta situación, muchos expertos en retail han visto la necesidad de adaptarse a los nuevos tiempos y generar un nuevo tenant mix, el cual no se limite a arrendar los típicos locatarios que venden ropa o dedicados a la gastronomía, sino que van complementando su oferta con locatarios de oficinas, siendo este el caso del centro comercial La Rambla o del Edificio Patio Panorama, con un centro de salud como es el caso del Jockey Salud, o con un hotel como es el caso de Balboa Strip Mall en Miraflores, que además cuenta con el Hotel Aloft, entre otros.
Es así que el uso tradicional de los centros comerciales se encuentra en extinción y así encontraremos más espacios arrendados que incluirán áreas de gimnasio, y por qué no como en otros países, áreas de vivienda residencial o también de coworking, en donde si bien se celebra un contrato de arrendamiento, también se le ofrece servicios adicionales como el servicio wi-fi, por ejemplo.
El año pasado fuimos testigos de que el centro comercial Real Plaza Salaverry diseñó un nuevo concepto llamado Coco cook-working (https://www.coco.pe). Coco consiste en un espacio culinario compartido dirigido a aquellos emprendedores o empresarios que no tienen el capital para adquirir equipos de cocina, por lo tanto, ofrecen el espacio, equipos de cocina, almacenaje frío o congelado y promueven el crecimiento, exhibición y evolución del negocio, ya que permite solo tener que preocuparse por los insumos y la mano de obra. Estos servicios que son proporcionados a través de la modalidad coworking se dan en base a una membresía en virtud a las horas requeridas. Estas inician desde las 5 horas con un precio de S/ 200.00 hasta las 150 horas por la suma de S/ 3,750.00.
Pero si de novedades hablamos, el centro comercial Jockey Plaza, además de los tantos servicios adicionales que ofrece a su público, tales como personal shopper por whatsapp (bajo el nombre de Jockey 2 Go) o casilleros para guardar las compras de sus clientes, el año pasado estrenó la Alameda Jockey, un concepto de aproximadamente 30 emprendedores que mediante la celebración de un contrato de arrendamiento bajo la modalidad de “Pop Up Store”, es decir, espacios que se arriendan en un lugar estratégico por un período corto de tiempo y que llaman mucho la atención del público. Esto es consecuencia de que el centro comercial incentiva a las pequeñas y medianas empresas a comercializar sus productos. El más grande ejemplo de la iniciativa es Yoy Lima Box Park, que básicamente se ha encargado de en un solo espacio aglomerar y arrendar a diferentes empresarios de la gastronomía y diseñadores locales, así como realizar eventos, y por si fuera poco, recientemente ha estrenado un nuevo concepto denominado el JockeyCopter; es decir, un espacio dedicado a ser un helipuerto en donde ofrece a su público esta alternativa de transporte para evitar el tráfico en caso desee aterrizar en otro aeropuerto que el Jorge Chávez, además de ofrecer rutas alternativas de turismo.
En este año 2020 nos encontramos esperando varias inauguraciones, entre las que destaca la del Shopping Center Life Style de La Molina de Parque Arauco, el cual contará con variedad de marcas de lujo entre sus arrendatarios. También se espera la inauguración de Las Vegas Plaza en Puente Piedra, en donde mezclarán el formato de venta con el de alquiler de locales, entre otros. Sin lugar a duda, tendrán que pensar en el elemento diferenciador del uso mixto de su centro comercial para hacer frente a la competencia y adquirir determinada ventaja competitiva. Veremos qué pasa.