Editorial de Gestión. Para lograr mejoras es necesario dejar de lado los dogmatismos y trabajar de manera técnica.  (Foto: Andina)
Editorial de Gestión. Para lograr mejoras es necesario dejar de lado los dogmatismos y trabajar de manera técnica. (Foto: Andina)

RECAUDACIÓN TRIBUTARIA. La presentación hoy del Gabinete ante el Parlamento debería servir para conocer las propuestas de corto y mediano plazo que se plantea el Gobierno de Pedro Castillo, algo que hasta el momento no está muy claro. Por ejemplo, algunas de las ofertas de campaña hacen prever que se plantearán cambios tributarios importantes, pues varias de las promesas realizadas requieren de ingresos que actualmente el país no tiene. Pero de eso no se ha dicho nada aún.

Ampliar la recaudación tributaria de manera sostenible es fundamental, pero eso no sucederá si se parte de supuestos errados como que todas las empresas formales –y sobre todo las grandes– no están pagando sus impuestos y solo buscan “robarle” al país. Las empresas cumplen con pagar sus impuestos, pero están en su derecho de discrepar de las acotaciones planteadas por la Sunat, frente a las cuales legalmente tienen derecho de acudir ante el Tribunal Fiscal y el Poder Judicial para que sean ellos en última instancia quienes decidan el monto que les corresponde pagar. Si realmente se busca lograr mejoras en materia tributaria es necesario dejar de lado los dogmatismos y trabajar de manera técnica.

Si bien la Administración Tributaria debe continuar con su labor de fiscalizar a los actuales contribuyentes y buscar a aquellos que tratan de darle la vuelta a la ley, mejorando sus capacidades, por ejemplo, usando los acuerdos de colaboración firmados con más de 110 países, o con la reforma del Catastro Nacional de Predios, como ha recomendado Luis Alberto Arias, lo cierto es que eso no basta.

Resulta vital que el Gobierno logre ampliar la base tributaria, reduciendo el alto nivel de informalidad que existe, la cual no está circunscrita solo a personas naturales (sobre todo en materia de profesionales independientes) sino que incluye a las empresas que prefieren trabajar al margen del ordenamiento jurídico. Pero para atacar la informalidad se requiere una mirada integral, no solo laboral o tributaria, y estar abiertos a ideas que podrían no ser populares. Por ejemplo, existe un alto número de trabajadores dependientes que no tributa pues ganan menos de 7 UIT anuales (menos de S/ 2,200 mensuales). ¿Se puede reducir el monto inafecto? En materia de empresas se podrían eliminar los regímenes especiales y trabajar en uno general más escalonado que el actual y que incluya diversas variables y no solo únicamente ingresos o trabajadores. ¿Lo hará este Gobierno?


TAGS RELACIONADOS