El aplazamiento de la conferencia ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de esta semana prácticamente garantiza meses de estancamiento en lo que respecta a las subvenciones a la pesca y al intento de ampliar la vacunación contra el COVID-19.
Las expectativas de lograr avances ya eran escasas antes de la reunión, que se pospuso el viernes después de que las nuevas restricciones de viaje impuestas por Suiza, debido a la variante ómicron, impidieron la celebración de muchas de las reuniones presenciales previstas. No se ha fijado una nueva fecha.
La directora general de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, dijo que las negociaciones no deben detenerse y que las delegaciones en Ginebra deben tratar de cerrar el mayor número de asuntos pendientes posible. “Esta nueva variante nos recuerda una vez más la urgencia del trabajo que tenemos encomendado”, señaló.
De hecho, las delegaciones se pusieron a trabajar el lunes para debatir una propuesta de India y Sudáfrica de renunciar a los derechos de propiedad intelectual (PI) para las vacunas y tratamientos del COVID-19 y una contrapropuesta de la UE de utilizar medidas flexibles incluidas en las normas existentes.
Médicos Sin Fronteras dijo que el mundo no puede perder más tiempo, con millones de vidas en juego.
“Hacemos un llamado a los países que se oponen a esta exención y la dilatan para que dejen las tácticas dilatorias y tomen medidas urgentes para adoptar una exención completa”, señaló la organización.
El descubrimiento de ómicron respalda uno de los argumentos de los defensores de la exención, según el cual no suministrar vacunas al mundo aumenta el riesgo de que surjan variantes peligrosas del coronavirus.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reiteró su creencia en la exención de las protecciones de la propiedad intelectual para las vacunas, y dijo que la noticia de la nueva variante muestra la importancia de actuar con rapidez.