Un estudio alertó sobre la cada vez mayor “precarización” de las condiciones laborales para los periodistas en Bolivia, donde cerca del 80% de los informadores tienen empleos “inestables” y los salarios cayeron en más de un 50%.
Los datos son parte del estudio ‘Situación de las condiciones de trabajo y de los derechos laborales de las/os periodistas en Bolivia’, realizado por el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla) en colaboración con la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) y la Unión Nacional de Instituciones para el Trabajo de Acción Social (Unitas).
El informe es un estudio cualitativo que “recupera la voz” de periodistas sobre las condiciones laborales que tienen actualmente, dijo a los medios el director ejecutivo del Cedla, Walter Arteaga.
LEA TAMBIÉN: La castaña o nuez amazónica, la otra víctima de la deforestación en Bolivia
LEA TAMBIÉN: Repunte de bonos de Bolivia desconcierta a Wall Street
El autor del estudio, el investigador Bruno Rojas, precisó que los datos se obtuvieron en 2023 mediante un sondeo al que respondieron 152 periodistas y en talleres de “diagnóstico participativo”, cinco presenciales y dos virtuales, con informadores de todo el país, además de 22 entrevistas en profundidad.
El investigador señaló que el reporte confirma la preocupación expresada antes por los dirigentes de los gremios periodísticos “de que se viene dando con mucha fuerza” en el sector “un proceso de precarización laboral”.
“Una precarización que en el país se ha ido dando ya desde hace varios años y que se ha asentado en todos los sectores económicos y todos los rubros”, indicó.
El estudio señala que casi el 80% de los periodistas en Bolivia cuenta con “empleos inestables, temporales, eventuales, ‘freelance’ y otras modalidades que se han ido instalando” en el sector, explicó.
Esto está “a tono con lo que viene pasando” respecto a la inestabilidad laboral en el país, agregó.
El informe también reflejó que los salarios que se pagan en el periodismo “han caído drásticamente”, en más de un 50%, y que poco más del 45% de los periodistas encuestados manifestaron que estaban ganando menos del salario mínimo nacional, que en 2023 era de 2,362 bolivianos (unos US$ 339).
Cerca del 70% de los informadores no aporta al sistema de pensiones para su jubilación y el 45% indicó que no cuenta con un seguro de salud, mientras que el 91% carece de un seguro de vida, entre otros hallazgos.
Según Rojas, a esto se suma que en algunos medios de comunicación se recortaron otros beneficios, como bonos de transporte o de producción, “con la condición de mantener el puesto de trabajo al periodista”.
Estas carencias en cuanto a la protección social y la seguridad ocupacional “retratan esta situación de precariedad laboral en que se encuentra la mayor parte de los periodistas en el país”, añadió.
Para el investigador, los periodistas “independientes” son en realidad “trabajadores encubiertos bajo la figura de ‘freelance’ y con modalidades de pago o reconocimiento de su trabajo que preocupan”.
Te puede interesar
- Una década del teleférico que une dos ciudades y transporta a 200 mil personas al día
- Bolivia se queda sin dólares, allanando el camino para retorno de Evo Morales
- ‘Habitat’, la propuesta que “rompe límites” y une la moda con el reciclaje en Bolivia