El peso mexicano subió a su nivel más fuerte en casi seis años después de que la Reserva Federal (Fed) elevara las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual e insinuara el final de su ciclo de ajuste.
La divisa llegó a subir un 0.8% a 17.8315 por dólar el miércoles, el nivel más fuerte desde septiembre de 2017.
Altas tasas de interés, sólidas remesas y un panorama político relativamente tranquilo han respaldado la moneda. México también se ha convertido en un destino para fábricas que buscan reubicarse más cerca Estados Unidos, una tendencia llamada nearshoring, que está impulsando la inversión y la demanda del peso.
“El tema de nearshoring y remesas le da una perspectiva muy positiva al peso”, dijo Alfredo Puig, operador de la casa de bolsa mexicana Vector, en Monterrey, México.
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La Reserva Federal de Estados Unidos anunció este miércoles una nueva subida de los tipos de interés, de 0.25 puntos, que sitúa las tasas en una horquilla de entre el 5% y el 5.25%.
La subida, la décima en el último año, está en línea con lo pronosticado por los analistas y llega en un contexto de alta inestabilidad bancaria. En el comunicado, el Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed (FOMC, en inglés) no aclaró si esta podría ser la última subida antes de hacer una pausa por la inestabilidad del sistema bancario
“Al evaluar la postura apropiada de la política monetaria, el comité continuará monitoreando las implicaciones de la información entrante para el panorama económico”, afirmó el comunicado.
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Así, el FOMC tendrá en cuenta “el endurecimiento acumulativo de la política monetaria, los rezagos con los que la política monetaria afecta la actividad económica y la inflación, y los factores económicos y financieros”.
La Fed está “preparada” para ajustar la postura de la política monetaria “según corresponda” si “surgen riesgos que podrían impedir el logro de los objetivos” de llevar la inflación al 2%, añade el comunicado.
En el comunicado el regulador hizo una breve referencia a la situación bancaria y aseguró que “el sistema bancario estadounidense es sólido y resistente”.
La Fed explicó que, tras las diez subidas consecutivas de los tipos desde marzo de 2022, la actividad económica se expandió “a un ritmo moderado en el primer trimestre”. La creación de puestos de trabajo “ha sido sólida en los últimos meses y la tasa de desempleo se ha mantenido baja”, mientras que “la inflación sigue elevada”, precisó.
Con información de Bloomberg y EFE