King of prussia
King of prussia

La escena en el mayor centro comercial de la costa este de Estados Unidos un reciente viernes por la mañana parece desmentir el relato apocalíptico que ronda los centros minoristas del país.

Un flujo constante de compradores navideños inundaba los relucientes corredores, entrando en tiendas que van desde Gap hasta Gucci. Al mediodía, una fila serpenteaba frente al local de la cadena de hamburguesas Shake Shack.

Detrás de la escena, hay transformaciones que se están haciendo para que esa multitud siga llegando.

King of Prussia Mall, un paraíso de compras de 260,000 metros cuadrados (2.8 millones de pies cuadrados) al noroeste de Filadelfia, es el tipo de destino que los defensores de los centros comerciales dicen que puede desafiar el ascenso de las compras por internet.

Es un extendido complejo que alberga tiendas de todos los rincones del universo minorista, más de 50 locales de comida y un salón de conserjería. Aun así, le toca lidiar con realidades de hoy, tales como una sucursal de J.C. Penney que cerró en julio y dejó un agujero en la zona clave de las tiendas ancla.

Los dueños, Simon Property Group Inc., el mayor propietario de centros comerciales de EE.UU., consideran que el cierre es una oportunidad: apostar a usos que no sean el comercio minorista.

Por primera vez desde que Woolworth’s y E.J. Korvette abrieron sus puertas hace más de 50 años, gran parte del espacio de King of Prussia estará dedicado a algo más que tiendas y restaurantes.

Simon planea un desarrollo de uso mixto para el sitio de 6.9 hectáreas (17 acres) del J.C. Penney y de su estacionamiento, parte de una eventual transformación que el presidente ejecutivo David Simon compara con una versión suburbana de Hudson Yards, el enorme complejo de oficinas, tiendas y residencias de la ribera oeste de Manhattan.

"No creo que la gente se dé cuenta de lo dinámicas que son estas propiedades y cómo evolucionan durante un largo período de tiempo", dijo Rick Sokolov, presidente y director de operaciones de Simon, en una entrevista en King of Prussia.

Es una señal de los tiempos el hecho de que hasta King of Prussia --que según Green Street Advisors se ubica en el 3% superior de los centros comerciales del país-- esté convirtiendo para otros usos lo que antes era espacio comercial.

Con el ascenso del comercio electrónico, que obliga a los minoristas y a los dueños de espacios a un rápido recálculo, los propietarios de centros comerciales están recurriendo a todo, desde restaurantes y locales de juego de bolos hasta edificios de apartamentos y hoteles, para que sus propiedades sean inmunes a internet.

En los últimos tres años, los propietarios de superficies minoristas han gastado US$8.000 millones en actualizaciones centradas en experiencias que no se pueden encontrar online, de acuerdo con la firma inmobiliaria Jones Lang LaSalle Inc.

King of Prussia ya es un destino en sí mismo. El complejo se encuentra en la encrucijada de cuatro autopistas principales a unos 32 kilómetros (20 millas) de las afueras de Filadelfia.

Sirve a los compradores locales adinerados del Main Line, pero también atrae a visitantes del norte de Maryland y Nueva Jersey, dijo Sokolov. Es el segundo centro comercial más grande de EE.UU. después del Mall of America de Bloomington, Minnesota, según el Directorio de Grandes Centros Comerciales, aunque Sokolov dijo que King of Prussia tiene más espacio comercial puro.

"King of Prussia se inscribe en una categoría única", dijo DJ Busch, un analista de Green Street. "Todos los minoristas están en King of Prussia. Hay de todo, y eso tiene mucho valor".

Sokolov se negó a divulgar detalles del plan propuesto para el centro comercial. En conferencia telefónica con analistas en octubre, el máximo responsable Simon dijo que el proyecto podría comprender un hotel, apartamentos y oficinas, y que tenía potencial para aumentar el valor de la propiedad de US$ 2,000 millones a más de US$ 3,000 millones.

"Estamos muy entusiasmados con las oportunidades de instrumentar y agregar componentes de uso mixto a King of Prussia", dijo Sokolov. "Estamos trabajando con el municipio de Upper Merion para lograr un alcance aceptable de renovación".