El peor momento para la industria relojera suiza fue el segundo trimestre de 2020, cuando el valor de las exportaciones descendió un 61,6 % en comparación con el mismo periodo de 2019. (Fabrice COFFRINI / AFP)
El peor momento para la industria relojera suiza fue el segundo trimestre de 2020, cuando el valor de las exportaciones descendió un 61,6 % en comparación con el mismo periodo de 2019. (Fabrice COFFRINI / AFP)

Las exportaciones de relojes de Suiza, uno de sus productos con más proyección exterior, cayeron un 33.3% en 2020 en comparación con el año anterior, a causa de la pandemia del COVID-19, informó hoy la Federación de la Industria Relojera Suiza.

El país helvético vendió 13.8 millones de relojes al exterior, 6.9 millones menos, y el valor de estas exportaciones cayó a 15,700 millones de euros, un desplome del 21.8% con respecto al año anterior.

El sector se vio muy afectado por las restricciones al turismo internacional, que es uno de los canales principales de venta.

El peor momento para la industria relojera suiza fue el segundo trimestre del 2020, cuando el valor de las exportaciones descendió un 61.6% en comparación con el mismo periodo de 2019, aunque fue mejorando hasta una caída de tan solo el 4.3% en el cuarto trimestre.

Esta rápida mejora se debe casi completamente a China, que se convirtió en el destino líder de los relojes suizos (en 2019 estaba por debajo de Estados Unidos) y fue el único país que registró un aumento de las compras (de un 20%), según los datos de la federación.

En Estados Unidos, ahora segundo principal cliente, se registró una caída del 17.5%, y las bajadas de doble dígito se dieron en casi todos los principales importadores, incluyendo España, decimotercer principal destino (-34.8%), Japón (-26.1%) o Reino Unido (-24.6%).

La federación expresó hoy en un comunicado su optimismo con respecto al 2021, a la vista de la rápida mejora en el último trimestre del 2020 y a los métodos que están utilizando las marcas para adaptarse a la situación, sobre todo la digitalización.

Aun así, la federación vaticinó que no se recuperarán las pérdidas del 2020, y que es difícil predecir cuándo volverá el mercado relojero al nivel en el que estaba antes de la crisis sanitaria.