John McAfee, creador del famoso antivirus informático y requerido en Estados Unidos por evasión fiscal, fue detenido en el aeropuerto de Barcelona, indicó la policía española.
La policía detuvo a este empresario de 75 años el sábado 3 de octubre cuando se disponía a volar a Estambul. Actualmente está en prisión preventiva cerca de Barcelona, según una fuente policial.
Su detención fue dada a conocer al día siguiente de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos detallara la inculpación de John McAfee por no haber declarado presuntamente los millonarios ingresos obtenidos de actividades como la promoción de criptomonedas o la venta de derechos para un documental televisivo sobre su vida.
La inculpación, establecida en junio y desvelada este lunes, apunta a que McAfee no pagó impuestos del 2014 al 2018 pese a recibir “ingresos considerables” de diversas fuentes.
McAfee habría evadido el pago de impuestos ordenando que sus ingresos fueran depositados en cuentas de otros, incluyendo cuentas en criptomonedas.
También se le acusa de ocultar a la administración fiscal estadounidense su patrimonio: bienes inmobiliarios, un yate y un coche que también figurarían a nombre de otras personas.
Según la policía española, las autoridades norteamericanas emitieron una orden de búsqueda a través de Interpol, y ahora esperan su extradición.
McAfee hizo fortuna en los años 1980 con su antivirus epónimo, que todavía luce su nombre. Desde entonces se convirtió en todo un gurú del mundo de las criptomonedas, y llegó a afirmar que ganaba con ellas US$ 2,000 al día. Actualmente tiene cerca de un millón de seguidores en Twitter.
El empresario dio lugar a toda una saga mediática cuando, estando instalado en Belice, un vecino suyo, un estadounidense de 52 años, fue misteriosamente asesinado en el 2012.
El crimen no fue resuelto, y cuando la policía se personó en el lugar de los hechos para investigar, lo encontró viviendo con una chica de 17 años y con una buena cantidad de armas en casa. McAfee no tardó en marcharse del país centroamericano, en una escapada que tuvo en vilo a la prensa durante más de un mes.
La familia del fallecido presentó más adelante una demanda de muerte por negligencia, y el año pasado un tribunal de Florida condenó al empresario a pagar a los deudos más de US$ 25 millones.