A medida que el agua de deshielo se separa de los glaciares, contribuye a mareas crecientes que ya pegan contra ciudades, playas y costas de todo el mundo.
A medida que el agua de deshielo se separa de los glaciares, contribuye a mareas crecientes que ya pegan contra ciudades, playas y costas de todo el mundo.

Los objetivos climáticos nacionales actuales son tan débiles que, pese a ellos, los glaciares y las capas de hielo elevarán el nivel del mar dos veces más rápido que si los países cumplieran sus promesas en virtud del Acuerdo de París, según un nuevo estudio publicado en la revista Nature.