Edward Tirtanata, un visionario que convirtió un pequeño puesto de café en Indonesia en una empresa valorada en más de mil millones de dólares, es una de las pocas historias tan inspiradoras en el mundo dinámico del emprendimiento. Hoy en Gestión Mix, hablaremos sobre el rápido crecimiento de la startup Kopi Kenangan, que ha revolucionado el mercado del café en el sudeste asiático y ha atraído la atención de inversores de todo el mundo. Su cuento de éxito se ha vuelto viral en las redes sociales.
La historia de Tirtanata con el café comenzó en sus años universitarios en Northeastern University en Boston. Mientras estudiaba finanzas y contabilidad, desarrolló un amor por el café que lo llevó a consumir una gran taza todos los días, ya sea de Dunkin’ Donuts o 7-Eleven. Este hábito se transformó en una pasión que más tarde definiría su carrera.
Edward nunca fue un estudiante tradicional. “De niño, era bastante travieso y no estudiaba mucho”, comentó en una entrevista con CNBC Make It. Sin embargo, siempre mostró un espíritu emprendedor innato, vendiendo cartas de Pokémon y bots de juegos para obtener ganancias. Inspirado por sus padres, quienes también eran empresarios, Tirtanata siempre disfrutó del desafío de crear y gestionar negocios.
Después de recibir una llamada de su madre sobre los problemas financieros del negocio familiar, Tirtanata decidió acelerar sus estudios y completar su programa de cinco años en solo tres. Regresó a Indonesia para convertirse en socio de su padre, una experiencia que, aunque estresante, lo preparó para su futuro como empresario.
Antes de fundar Kopi Kenangan, Tirtanata lanzó una cadena de tiendas de té llamada Lewis & Carroll en 2015. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que el negocio no era tan rentable como esperaba. Durante una conversación casual con su amigo de toda la vida, James Prananto, identificaron un problema clave: las grandes cadenas de café y té en Indonesia eran demasiado caras para la población local.
En 2017, con una inversión inicial de US$15,000, Tirtanata y Prananto abrieron su primer puesto de café grab-and-go en Yakarta. Este modelo les permitió evitar los altos costos de alquiler y diseño de una cafetería tradicional, y en su lugar, invertir en ingredientes de alta calidad. “En lugar de enfocarnos en el sofá o en el Wi-Fi rápido, nos enfocamos en una buena taza de café de alta calidad”, explicó Tirtanata.
Esta estrategia resultó ser un éxito rotundo. En los primeros dos años, Kopi Kenangan creció a más de 200 ubicaciones en 10 ciudades, destacándose en un mercado saturado gracias a su enfoque único y accesible.
¿Qué diferencia a Kopi Kenangan de sus competidores en un mercado tan competitivo como el del café? Según Tirtanata, hay tres razones principales: su modelo grab-and-go, su integración tecnológica y su enfoque hiperlocal. A diferencia de cadenas globales como Starbucks, Kopi Kenangan adapta el sabor y la robustez de su café a las preferencias locales utilizando un enfoque basado en datos.
Durante la pandemia de COVID-19, Tirtanata y Prananto redoblaron sus esfuerzos para integrar la tecnología en su negocio, lo que les permitió triplicar la cantidad de tiendas durante este período desafiante. Este enfoque tecnológico no solo optimizó sus operaciones, sino que también mejoró la experiencia del cliente.
Hasta abril de 2024, Kopi Kenangan ha recaudado más de US$230 millones en fondos de inversores globales. Actualmente, la cadena de café cuenta con tiendas en Indonesia, Malasia y Singapur. Pero Tirtanata no planea detenerse allí; su visión es expandirse globalmente y eventualmente cotizar la empresa en la bolsa de valores de EE.UU.
“Se vuelve más complicado a medida que el negocio crece, por lo que trato de aprender todos los días cómo ser un mejor líder”, afirmó Tirtanata. Su entusiasmo por el futuro es palpable: “Creo que estamos apenas al comienzo de nuestro viaje”.
Contenido GEC