- Ganador de Maine se opone a que se revele su identidad
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El ganador de los 1,350 millones de Mega Millions presentó una demanda federal contra la madre de su hija, por haber violado el acuerdo que ambos firmaron y que se comprometían a mantener en reserva la identidad del afortunado hombre de Maine.
El viernes 13 de enero de 2023, la suerte le sonrió a un hombre de Maine, que acertó los seis números del tercer premio más grande en la historia de la lotería Mega Millions. Sin embargo, esto no lo abrumó y, antes de reclamar el bote, decidió tener un plan bien armado para mantener en reserva su identidad.
Recién, el 22 de febrero, casi seis semanas después del sorteo, procedió a pedir los 723,5 millones de dólares en efectivo, antes de impuestos. Y, aunque en Maine los ganadores de premios mayores no pueden permanecer anónimos, este hombre eludió revelar su identidad, al pedir su gran premio a través de una sociedad de responsabilidad limitada (LLC). Se trataba de su secreto más grande, pero Sara Smith lo puso al descubierto y, lo más probable, es que tenga que pagar caro por ello.
El hombre de Maine, que ganó 1,350 millones de Mega Millions, demandó a Sara Smith porque incumplió con un acuerdo de confidencialidad y esto -asegura- le ha causado un “daño irreparable”, ¿pero de qué se trata el documento?
“Debido a preocupaciones únicas de seguridad, protección y privacidad asociadas con la ganancia de lotería, la demandada accedió a entrar en un acuerdo de no divulgación (NDA) con John Doe para promover la protección y seguridad de John Doe, la demandada, y su hija, y evitar el daño irreparable de permitir que los medios o el público en general descubriera, entre otras cosas, la identidad de John Doe, su ubicación física, y activos”, lee la demanda.
El 8 de febrero -antes de que fuera reclamado el premio- la mujer firmó el acuerdo de confidencialidad, que tendría vigencia hasta el 1 de junio de 2032, cuando la hija de ambos cumpliera los 18 años. A cambio de su firma, con su consecuente silencio, John Doe le prometió apoyo y recursos de seguridad continuos.
El convenio estipula que los autorizados a saber de la ganancia eran la menor, abogados, asesores financieros, contables u otros que necesitaran conocer. Para informarle a cualquier otra persona, se necesitaba el permiso escrito de Doe.
El acuerdo indica que, si Sara Smith revelaba a personas no autorizadas sobre el premio de lotería, sea de manera intencional o casual, ella debía notificarle en un periodo de 24 horas a John Doe a quién y cómo expuso la información, así como las medidas tomadas para que no volviera a ocurrir.
La mujer no pudo guardar el secreto y divulgó, en septiembre, los datos confidenciales a los familiares del afortunado ganador. En el documento asegura que Smith reveló, a través de llamadas telefónicas, al padre y a la madrastra de Doe, que se había convertido en el ganador del cuarto premio más grande en la historia de la lotería de Estados Unidos. La noticia también llegó a oídos de la hermana del hombre de Maine.
El presunto agraviado se enteró de la filtración de información en septiembre y presentó la demanda en noviembre. Además de una indemnización no menor de 100 mil dólares, según documentos judiciales revisados por The Daily Beast, reclama dinero por los gastos de abogado y judiciales del caso.
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