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Bruselas (Reuters).- Líderes de la Unión Europea lograron un acuerdo sobre una hoja de ruta para establecer un único supervisor bancario para la zona euro después de que Francia y Alemania disimularon sus diferencias sobre las prioridades para superar la crisis de deuda del bloque.
Diplomáticos que leyeron un borrador de las conclusiones de la cumbre de la UE en Bruselas el jueves dijeron que los líderes acordaron "el objetivo de completar el marco legal antes de fin de año" con su implementación "en el curso del 2013".
El momento en que el Banco Central Europeo se convierta efectivamente en el supervisor bancario del bloque es importante porque abriría la puerta a que el fondo de rescate de la zona euro recapitalice directamente a los bancos en problemas, sin aumentar las deudas de los gobiernos.
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, dijo que esto es vital "para romper el círculo vicioso entre la deuda soberana y los bancos".
El acuerdo, que deja incertidumbre sobre el alcance de la unión bancaria europea, se da después de que los líderes de Alemania y Francia, las dos principales potencias de Europa, se enfrentaron respecto a un mayor control de la UE sobre los presupuestos nacionales y la supervisión bancaria.
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande , se reunieron en privado poco antes del inicio de la vigésimo segunda cumbre de la UE desde que surgió la crisis de deuda hace casi tres años.
Por primera vez, la reunión no estuvo bajo la intensa presión de los mercados financieros, que se han calmado desde que el BCE prometió el mes pasado que intervendría de manera decisiva, si fuese necesario, para comprar bonos de países en problemas de la zona euro para preservar a la moneda.
En declaraciones al Parlamento en Berlín horas antes de la cumbre, Merkel también intentó desacelerar el proceso para crear un supervisor bancario europeo, al decir que la calidad era más importante que la velocidad.
Alemania se resiste a ver sus bancos de ahorro y cooperativos bajo una supervisión externa un tema políticamente delicado y dice que la observación europea debería cubrir sólo a las grandes instituciones transnacionales.
Berlín rechaza cualquier garantía conjunta a los depósitos en la que los países más ricos deban verse obligados a cubrir a bancos de estados más pobres.
Cuando se le preguntaron las razones de la demora de Merkel, Hollande dijo a periodistas que podría deberse al calendario electoral de Alemania, que tiene prevista una elección general en septiembre del 2013, agregando que las dos potencias dominantes de la UE tienen el deber de resolver la crisis.
En su discurso ante el Parlamento, Merkel eludió el tema de una posible línea de crédito para España, que funcionarios de la zona euro esperan sea solicitada por Madrid en las próximas semanas, pero reiteró su deseo de mantener a Grecia en el área de la moneda única pese a sus problemas crónicos de deuda.
En Grecia, los trabajadores fueron a huelga por segunda vez en tres semanas, con el objetivo de mostrar a los líderes de la UE que una nueva ola de recortes de pensiones y salarios sólo empeorará sus complicaciones luego de cinco años de recesión.
"Hemos hecho verdaderos avances para fortalecer la disciplina presupuestaria con el pacto fiscal pero somos de la opinión, y hablo por todo el Gobierno alemán, de que podemos ir más lejos al dar a Europa derechos reales de intervención en los presupuestos nacionales", dijo Merkel a la Cámara baja de su país.
Una propuesta del ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble, para crear un comisario europeo de la moneda única con una fuerte autoridad era una opción viable, dijo la canciller conservadora, y un mayor control europeo debería ir a acompañado por un Parlamento europeo más fuerte, indicó.
Esas medidas requerirían cambios en el tratado de la UE que Hollande parece querer evitar.