Las reservas internacionales netas (RIN) volvieron a crecer en julio, luego de tres meses de reducirse continuamente, según el Banco Central de Reserva (BCR).
Tras contraerse desde abril, las reservas internacionales, administradas por el BCR, se incrementaron a US$ 61,013 al 24 de julio.
Así, las reservas aumentan este mes en US$ 1,933 millones por un mayor volumen de depósitos del sistema financiero en el BCR.
Las reservas internacionales son la diferencia entre los activos y pasivos internacionales del BCR, y reflejan la liquidez internacional de un país y su capacidad financiera para afrontar sus obligaciones en moneda extranjera.
Las reservas se recuperaron de la mano del incremento de los depósitos en moneda extranjera en el sistema financiero, indicaron a Gestión ejecutivos bancarios.
“La incertidumbre que ocasionó la tensión comercial entre EE.UU. y China generó nerviosismo en los agentes económicos, personas y empresas, quienes se refugiaron en dólares y, por tanto, se acentuaron los depósitos bancarios en esta moneda”, dijo uno de los ejecutivos.
En línea con una mayor volatilidad del tipo de cambio, que en el transcurso del año fluctúa entre S/ 3.21 y S/ 3.29, con presiones al alza del dólar en los últimos meses, los depósitos en esa moneda ganaron tracción en junio.
El mes pasado, estas cuentas se engrosaron en 9% a US$ 28,249 millones, un ritmo de crecimiento anual que denota una aceleración respecto de la tasa de 5.7% observada en diciembre del 2017.
Encaje
Por exigencias de encaje monetario, las instituciones financieras deben mantener en el BCR una parte de los depósitos que captan de personas y empresas, y como estas cuentas en dólares aumentaron en julio, lo propio aconteció con las reservas en julio, detalló uno de los entrevistados.
En los meses previos, las reservas internacionales disminuyeron conforme el BCR redujo la tasa de encaje en dólares, que pasó de 40% en diciembre del 2017 a 35% en julio del presente año, con el objetivo de mantener las condiciones financieras locales y mitigar el efecto de los aumentos de las tasas de interés de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed).