La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados tendrán que lidiar con “muchos problemas de demanda” antes de aumentar su suministro en enero del 2021, debido a los recortes de producción en las refinerías petroleras, afirmó el jefe de la división comercial de Saudi Aramco.
La OPEP y sus aliados -una alianza conocida como OPEP+- planean subir el bombeo en 2 millones de barriles por día (bpd) a partir de enero, tras los recortes récord de producción de este año, en un momento en que la pandemia del coronavirus golpea a la demanda. Si se confirma la medida, la reducción total estaría en torno a los 5.7 millones de bpd.
“Vemos un estrés en los márgenes de refinado y también que hay muchas refinerías que o recortan su capacidad de refinado al 50%-60% o cierran”, dijo Ibrahim Al-Buainain al Gulf Intelligence.
“No creo que el negocio (del refinado) sea sostenible con estas tasas (márgenes de refinado)”, agregó.
No obstante, es probable que la demanda petrolera de China se mantenga sólida durante el cuarto trimestre y en el 2021, mientras su economía crece y el resto del mundo está en territorio negativo, señaló.
Entre las incertidumbres que enfrenta el mercado petrolero destacan el aumento de producción en Libia y una segunda ola mundial de infecciones de COVID-19, sobre todo en Europa, dijo Al-Buainain.