El T-MEC reemplazará el viejo Nafta o TLCAN. (Foto: AFP)
El T-MEC reemplazará el viejo Nafta o TLCAN. (Foto: AFP)

Los gobiernos de y intentaron calmar el lunes una creciente controversia sobre un plan estadounidense para monitorear las normas laborales mexicanas, en virtud del remozado acuerdo comercial de América del Norte (T-MEC).

La semana pasada, firmaron en la capital mexicana una serie de modificaciones al pacto, que reemplazará el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), vigente desde 1994.

Sin embargo, días después se dio a conocer que Estados Unidos planeaba desplegar agregados laborales en México para monitorear la implementación de una reciente reforma laboral local, lo que generó preocupaciones del Gobierno.

El representante comercial de Estados Unidos, , quien se reunió el lunes en Washington con el subsecretario de Relaciones Exteriores mexicano Jesús Seade, le aseguró en una carta que el uso de los agregados era una práctica común, y que cumplirían con las leyes de México.

"Estos agregados no serán 'inspectores laborales' y estarán sujetos a todas las leyes mexicanas relevantes", dijo Lighthizer en el documento, que fue divulgado por los dos países.

Cuestionado por periodistas sobre la carta, Seade, quien es considerado el principal negociador de México del T-MEC, dijo que había aclarado las preocupaciones de México sobre los agregados laborales.

“El embajador Lighthizer fue sumamente correcto, en decir: disculpa”, dijo Seade, y agregó que las autoridades mexicanas no habían identificado nada más “cuestionable” en el plan estadounidense.

Previamente, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, dijo que la disputa no pondría en peligro al acuerdo comercial, y que dependería de México otorgar la acreditación a los agregados laborales propuestos en su territorio.

“Los agregados requieren la autorización de México”, dijo Ebrard durante la habitual conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador. “Un país no puede designar agregados en otro si no tienes la autorización del país anfitrión, ese es el punto central”.

La disputa se trata del último capítulo de una serie de tensiones sobre el futuro del pacto comercial que mantiene en vilo a la economía de México, que envía alrededor del 80% de sus exportaciones a Estados Unidos.

Sin embargo, el peso mexicano se fortaleció el lunes a niveles por debajo de 19 por dólar, alcanzando su nivel más fuerte frente al dólar en más de cinco meses.