La tasa creció 10 puntos porcentuales con respecto al año anterior. (Foto: GEC)
La tasa creció 10 puntos porcentuales con respecto al año anterior. (Foto: GEC)

El 56% de empresas peruanas ha formalizado un área de gestión de riesgos en 2020, un incremento de 10 puntos porcentuales con respecto al año pasado, de acuerdo al estudio “Riesgos empresariales: gestión y prevención en el nuevo normal”, elaborado por EY Perú.

“En el estudio se puede apreciar una tendencia creciente en el porcentaje de empresas que manifestaron contar con un área formal de gestión de riesgos, si las comparamos con los resultados obtenidos en los estudios previos”, comenta Renato Urdaneta, Socio de Consultoría de EY Perú.

“Vemos así que las empresas peruanas vienen fortaleciendo y formalizando cada vez más sus prácticas en este rubro, de acuerdo con estándares internacionales y prácticas líderes. Una clara muestra del creciente interés de las mismas por seguir fortaleciendo el ambiente de control de sus organizaciones”, añadió.

El estudio indica que entre las empresas que manifestaron contar con una función de riesgos, el 42% de los responsables de dicha función tienen como línea directa de reporte a la gerencia general.

Además, el porcentaje de empresas que cuenta con un área responsable de la gestión de riesgos empresariales (distinta al área de auditoría interna) es de 56%.

Los sectores más avanzados con respecto en este ámbito son Petróleo y Minería (78%), Energía y Electricidad (74%), Educación (73%), Construcción (72%) y Transporte y Comunicaciones (52%). Todos con una tendencia ascendente frente a los resultados obtenidos en los estudios previos de los años 2019 y 2017.

Una tendencia que se ha repetido en los tres estudios realizados por EY es que la conformación de un área de gestión de riesgos está directamente relacionada al tamaño de la empresa, medido en función de sus ingresos.

Por ejemplo, el 90% de empresas que facturó en el último año más de US$ 1,000 millones aseguró tener implementado esta función a nivel interno, un contraste importante si las comparamos con las empresas con facturaciones menores, de hasta US$ 50 millones, en donde se observa que solo el 38% cuenta con esta función de riesgos formalmente constituida.

Esto se explica en que la mayor complejidad de estos negocios, producto de sus ingresos, hace necesario un mayor nivel de formalización para mantener los riesgos debidamente controlados y monitoreados.

Los altos ejecutivos que participaron en el estudio también identificaron una serie de iniciativas que tendrían un impacto significativo para fortalecer la gestión de riesgos en sus organizaciones.

En ese sentido, aseguraron que las iniciativas de optimización y digitalización de procesos (60%), de fortalecimiento de la cultura de control (52%) y de gestión de reportes a la alta dirección (48%), son a las que se le debe prestar mayor atención a fin de fortalecer dicha gestión de riesgos.

Otras iniciativas comentadas también, en menor medida, que tendrían un impacto positivo en el fortalecimiento de la gestión de riesgos están relacionadas con el soporte de sistemas (39%), la formalización de políticas y procedimientos (31%) y mejoras en las competencias del personal (22%).