Según la última encuesta salarial de (Total Remuneration Survey 2017, por sus siglas en inglés, la brecha salarial entre mujeres y hombres aún se mantiene en un 12% a nivel ejecutivo en el Perú.

Sin embargo, ha disminuido 15% en los últimos tres años (del 2014 al 2017), aunque esto no represente que las empresas remuneran a sus trabajadores de acuerdo al impacto y responsabilidad de su puesto, sino que distintas variables entran en juego a la hora de determinar el salario de un trabajador.

De acuerdo con el estudio de la consultora en Recursos Humanos, los ejecutivos hombres en promedio reciben una remuneración de S/ 700,000, mientras que las mujeres reciben S/ 630,000.

A nivel regional, las cifras no son muy diferentes. La brecha salarial en Chile es 18%, México 16%, Brasil 14%, seguido de Argentina con 12% y Colombia 8%.

Las diferencias de salario del estudio de Mercer están fundamentadas en una muestra de empresas multinacionales, transnacionales y grupos peruanos importantes, que desde hace muchos años vienen trabajando en diseñar políticas de compensación para sus trabajadores, basadas en criterios objetivos de valoración de puestos, revisiones salariales periódicas, etc.

Según el estudio del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) “Perú Brechas de género 2016”, la brecha salarial nacional se incrementó a 28.6% en promedio en todos los niveles de cargos.

De acuerdo con esta misma publicación, el ingreso promedio de mujeres en el sector urbano es de S/ 1,161, mientras que en hombres es de S/ 1,688.

En octubre del año pasado, el tema pasó a estar en la agenda del gobierno y especialmente del Congreso, en voz de la congresista Mercedes Araoz, quien impulsó el proyecto de Ley que busca la igualdad remunerativa entre los géneros.

Esta ley fue aprobada en el pleno del Congreso el 15 de noviembre de este año y busca no sólo la igualdad remunerativa entre hombres y mujeres, sino en puestos con similares responsabilidades.

Entre otras cosas, las compañías están obligadas a delimitar las responsabilidades y funciones de los puestos de trabajo, fijar remuneraciones por categorías y contar con una política salarial.

“Para evitar estas , es necesario contar con un sistema de valoración de puestos, que permita dar objetividad al peso relativo de los puestos de trabajo, con factores de evaluación asociados a los mismos”, afirmó, la líder de Compensación y Reconocimiento de Mercer, Adriana Villalba.

Esto permitirá ir disminuyendo las brechas de equidad interna en las organizaciones, así como comparar sus salarios con los del mercado para medir la competitividad salarial.

Progreso
En su estudio “When Women Thrive” (‘Cuando las mujeres progresan’), realizado también por Mercer, es imperativo para el mundo de los negocios contar con una mayor diversidad de género en las empresas, pues la presencia femenina impacta positivamente, no solamente a la productividad y rentabilidad de una compañía, sino que también contribuye al crecimiento macroeconómico del país.

El estudio fue realizado con el asesoramiento de la EDGE Certified Foundation, y su objetivo es investigar sobre la diversidad de género en el terreno laboral a nivel mundial.

Para este año, la encuesta cuenta con nuevas fuentes de datos y una muestra mayor, así como más representativa de firmas.

Recopiló datos de 50 de ellas, revisó acuciosamente los documentos y publicaciones académicas de organismos internacionales, y entrevistó a 202 compañías de sectores como servicio, producción y manufactura, información y tecnología, energía y otras.

“En Perú se ha avanzado en este tema, cuando se observa la presencia de líderes mujeres en importantes cargos políticos y del sector gobierno. Por ejemplo, la presidenta del Consejo de Ministros es una mujer y la superintendencia de Banca, Seguros y AFP también, cargos que históricamente habían sido liderados por hombres”, dijo Mercer.

A nivel Latinoamérica también se encuentran algunas cifras interesantes, en cuanto a diversidad e inclusión de género se trata.

Afirmaciones como: “Los CEO demuestran estar activamente envueltos en impulsar estos programas”, de las empresas encuestadas, 27% está de acuerdo con ello, a nivel global un 22%, mandos medios un 19%, frente al 11% de los resultados totales.

Por último, uno de los puntos que más llamó la atención, es que ante la afirmación de “la igualdad de género es parte de la filosofía o estrategia de mi organización, el 43% está fuertemente de acuerdo, frente a un 31% del resultado global.