El sector micro y pequeña empresa (mype) ha sido y sigue siendo uno de los más afectados por la pandemia del COVID-19 en el país, en tanto su recuperación depende de dos factores: mercado y financiamiento, señala a Gestión.pe la presidenta de la Asociación Nacional de Gremios de Pequeña Empresa PYME Perú, Ana María Choquehuanca.
De este modo, precisó que si no se promueve la inversión privada en el país, ambos indicadores se verán perjudicados. Según indica, actualmente hay un mercado nacional a través de las compras estatales pues de acuerdo a una ley, el 40% de las compras estatales que se realizan deben ser suministradas por las mypes (Compras a MYPErú).
En tanto, el segundo mercado es el de compras privadas, el cual requiere de productos y servicios producidos precisamente por estas pequeñas unidades productivas.
“Entonces si no hay inversión privada, este encadenamiento entre pequeñas empresas con las grandes (empresas) no se va a dar de ninguna manera. (...) Ya existe un mercado estatal, está ahí, pero se necesita del otro mercado, que se abra el otro mercado (privado). Para construir este encadenamiento con la gran empresa han pasado años, se ha logrado que la gran empresa compre a la pequeña”, dijo.
A modo de ejemplo, indicó que las empresas mineras ubicadas en una determinada región subcontratan o tercerizan servicios de las pequeñas empresas, por lo que de no realizar inversiones, no se realizarán proyectos en esta industria o en otras actividades económicas.
“Si se cierra la construcción de proyectos no se contratarán a proveedores locales. Una gran empresa debe seguir invirtiendo y mejor si lo hace en el propio país o si viene la empresa de otro. Ahí se genera ese movimiento de la cadena de valor al rededor”, sostuvo.
Movimiento de la actividad diaria
La coordinadora de Emprendimiento e Innovación de Innova ESAN, Karen Montjoy, coincidió con Choquehuanca en la figura del engranaje entre la empresa privada y el sector público.
Explicó que las mypes formales constituyen más del 99% de las empresas formales del país y dan trabajo al 47% de la Población Económicamente Activa (PEA), cuya actividad del día a día se mueve en función a servicios y desarrollo de productos para abastecer a diversos sectores, entre ellos, el privado.
“Las mypes son parte de un engranaje que empieza a rodar por el Estado por un lado y por otro, por el sector corporativo. Entonces el Estado hace una parte del movimiento del engranaje y la otra parte la demanda del sector privado, por lo tanto, no se puede pensar que el Gobierno es el que va a absorber todo el movimiento y toda la responsabilidad de las actividades en toda la cadena: la grande, mediana, pequeña y microempresa”, afirmó.
Indicó que entre los principales sectores que demandan los servicios o productos de mypes locales son la minería, agroindustria, turismo, pesca, textil y retail.
“Por ejemplo si una empresa es exportadora de prendas de vestir de algodón, la empresa no solo da trabajo a los trabajadores de la compañía, sino, requiere servicios de otras empresas. A su vez, los trabajadores salen a comer un menú, entonces ahí ingresan los pequeños comercios del día a día como los restaurantes o quienes brindan el servicio de taxi. El engranaje no se mueve solo por la demanda del Gobierno, dijo.
La economía y consumo
Por su parte, el presidente de Asociación de Instituciones de Microfinanzas del Perú (Asomif), Jorge Delgado, señaló que si no se promueve la inversión privada la economía no se reactivará, y ello llevaría a que toda la cadena productiva, desde las micro y pequeñas empresas hasta las empresas corporativas, se perjudiquen.
Agregó que el hecho de no promover la inversión privada también impactará en la generación de puestos de trabajo, pues si no hay empleo, no se podrán generar ingresos.
“Si una bodega no tiene fideos, leche, atún o arroz, ¿Qué va vender esa bodega? Y para poder vender la gente necesitará ingresos para consumir. Es decir, se debe volver a una realidad a la que había antes de la pandemia, donde la economía y la inversión privada seguía creciendo”, dijo.
Agregó que al tener mayores ingresos, la capacidad de compra de las personas es mayor para cualquier tipo de producto, ya sea alimenticio, vestuario o servicios.
“Entonces, la economía necesita de las empresas corporativas y de las mypes, que son toda una cadena productiva”, afirmó.
Según pudo conocer Gestión.pe, algunas empresas pequeñas que brindaban servicios a las grandes han cerrado sus operaciones y despidieron a su personal debido a que esas compañías han paralizado de manera definitiva sus nuevos proyectos por la incertidumbre que genera un eventual gobierno de Pedro Castillo, quien dijo estar a favor de la inversión privada, “pero sin ningún tipo de abuso”.
En recientes declaraciones, dijo que en un eventual gobierno suyo, los proyectos mineros Tía María y Conga no serían puestos en marcha. También afirmó que revisarían los tratados de libre comercio (TLC).