La petrolera Petrobras, la mayor empresa de Brasil, reducirá sus inversiones para el período entre el 2021 y 2025 desde los US$ 64,000 millones inicialmente previstos hasta entre US$ 40,000 y 50,000 millones, y venderá más activos, para enfrentar la crisis generada por el coronavirus.
La fuerte reducción de las inversiones fue anunciada en un comunicado que la petrolera estatal envió la noche del lunes al mercado y en el que informó que tuvo que revisar sus proyectos de exploración y explotación “ante la crisis provocada por el COVID-19”.
La pandemia del coronavirus provocó una fuerte caída en la demanda mundial por combustibles, a lo que se siguió la consecuente caída de los precios, y generó una grave crisis económica en Brasil, que igualmente generó una expresiva apreciación del dólar frente al real.
La crisis obligó a Petrobras, una empresa controlada por el Estado pero con acciones negociadas en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York y Madrid, a revisar sus proyectos de exploración y explotación para darle prioridad a los más rentables, explicó la empresa.
Como consecuencia, la petrolera revisó el Plan Estratégico de Inversiones para el quinquenio 2020-2024 que había anunciado el año pasado y que preveía inversiones por US$ 60,000 millones en cinco años.
La empresa prevé que sus inversiones en el período entre el 2021 y 2025 se ubicarán entre US$ 40,000 millones y US$ 50,000 millones, en parte por la apreciación del dólar, que redujo sus costes en reales y le dio un mayor margen de maniobra.
Inversiones serán concentradas en presal
Petrobras explicó que centrará sus inversiones en los proyectos de producción en el presal, el horizonte de exploración que Brasil descubrió en aguas muy profundas del océano Atlántico por debajo de una capa de sal de dos kilómetros de espesor que puede convertir al país en uno de los mayores exportadores mundiales de hidrocarburos.
Las gigantescas reservas descubiertas en el presal y la tecnología que le permite a Petrobras reducir significativamente sus costes de producción en aguas muy profundas convirtieron este horizonte en el más rentable para la empresa.
La revisión de las inversiones “busca maximizar el valor del portafolio de exploración y explotación de la empresa con foco en activos de clase mundial en aguas profundas y muy profundas”, según el comunicado.
De acuerdo con la petrolera, los activos en el presal, principalmente el campo de Buzios -mayor productor de petróleo del país- tendrán una mayor importancia en el portafolio de la compañía y se quedarán con cerca del 71% de la inversión total en exploración y explotación entre el 2021-2025
Antes de la revisión del plan estratégico, Petrobras pretendía destinar al presal el 59% de sus inversiones en el quinquenio.
“Las inversiones en estos activos de clase mundial, en los cuales somos dueños naturales, están en la línea con nuestros pilares estratégicos y son más resistentes a los precios más bajos del crudo”, afirmó la compañía en su comunicado.
La empresa informó igualmente de que, junto con la revisión de su portafolio de inversiones concentrado en el presal, decidió también incluir nuevos activos en su ambicioso programa de desinversiones, pero no aclaró cuáles campos petroleros pondrá a venta.
La revisión del plan estratégico también tuvo en cuenta las nuevas proyecciones de los precios del petróleo de la empresa para los próximos años y su meta de reducir la deuda bruta hasta US$ 60,000 millones en el 2022.
La empresa informó de que a finales de noviembre anunciará el impacto que la revisión de inversiones tendrá en sus metas de producción en los próximos años.
La producción promedio de la estatal en el 2019 fue de 2.6 millones de barriles diarios y la meta de su plan quinquenal era elevarla en cerca de 5% al año en el lustro, con lo que alcanzaría 2.90 millones en el 2020, 3.04 millones en el 2021, 3.30 millones en el 2022 y 3.46 millones en el 2023.