Mirtha Trigoso
¿Que motiva a una ucraniana a dejarlo todo en su país y venir el Perú? En el caso de Katia Horbatiuk la arrastró su sueño de conocer más sobre el arte del tejer, y al ver a su llegada que en el país no era tan popular este oficio, y que prácticamente estaba olvidado, decidió popularizarlo.
Es así, nos cuenta que nace hace 10 años “Pecosa”, la primera escuela de tejido a crochet en el país, especializada en amigurumis ( muñecos tejidos)
“Aprendí a tejer a los ocho años cuando mi tía Maria me enseño los puntos básicos y me regalo un libro de tejido, que aún conservo, con el que me volví adicta a hacer tapetitos, luego aprendí a hacer amigurumis. Además estudié ingeniería de software, pero sin duda ver como una persona que nunca ha agarrado el crochet va formando el cuerpo de su primer amigurumi me llena de emoción… Nunca pensé que la vida me daría la oportunidad de compartirle este hermoso arte a miles de personas”, señala.
Y le ha ido muy bien, destaca, teniendo en cuenta que por su escuela ya han pasado más de 17,000 alumnas de todas las edades , desde niñas de ocho años, hasta abuelas.
" Muchas de estas alumnas ya han realizado sus propios emprendimientos con muy buena aceptación”, dijo
Impacto pandemia
Pero sobre todo destaca Katia Horbatiuk, es a raíz de la pandemia muchas mujeres y hombres han buscado una afición con la cual llenar sus espacios de tiempo , y es en el tejido que han encontrado algo entretenido pero también sustancioso para proyectarse en algún negocio futuro.
" El tejido se ha puesto de moda en la coyuntura actual. Es que si se realiza en soledad, simultáneamente se ingresa en un estado de reflexión, y se disfruta. Y si tejemos en grupo, hacemos nuevas amistades. En cualquiera de los dos casos nuestro cerebro libera endorfinas, las cuales nos relajan y generan una sensación de bienestar tan necesario en estos tiempos”, destaca.
Y si bien brindaban antes de la pandemia sus talleres en locales que tenían en Lima, ahora lo hacen de manera virtual.
¿ Tienen planes de expansión con su escuela? Refirió que sí, es por ello que en los próximos años buscan llegar con locales, o talleres virtuales a otros países de la región, y en el país a ciudades como Arequipa.
Pero además buscan desarrollar además de los amigurumis, prendas como chompas, con otro tipo de insumo.
" Ahora con los muñecos tejidos trabajamos 100% algodón, pero en el caso de las chompas podemos hacerlo con alpaca o con otras fibras”, dijo.