La crisis del COVID-19 está cambiando los hábitos de las personas y algunos expertos ya apuntan que algunas de estas nuevas rutinas han llegado para quedarse. El confinamiento ha hecho, por ejemplo, que se potencie el teletrabajo y también las operaciones a través de canales digitales, como puede ser la banca a distancia. Este cambio de hábitos puede hacer que algunas industrias tengan un nuevo empuje, como es el caso de las fintech.
Según el portal Business Insider, las startups que se dedican al sector financiero pueden experimentar ciertas tensiones en este momento duro de la crisis, sobre todo, aquellas que tengan problemas de liquidez. Sin embargo, los expertos consultados ven también que este escenario abre una “oportunidad” para este tipo de negocios.
“Esta situación está sirviendo para que se descubra el poder de la banca digital y los servicios de las fintech, con Fintonic como uno de los ejemplos más relevantes. Los ya clientes están haciendo un uso más activo, pero además se está dando un crecimiento exponencial de nuevos usuarios", explica Laura González-Estéfani, fundadora y CEO de la aceleradora e incubadora tecnológica TheVentureCity, que participa en algunas fintech como Finconecta.
Los bancos mantienen sus oficinas abiertas como uno de los servicios esenciales en el estado de alarma, sobre todo, pensando en aquellos colectivos menos digitalizados aunque tratan de avanzar hacia aumentar la base de usuarios que realiza sus operaciones mediante la banca online.
Los servicios financieros online, al alza
“El banco tradicional que no tuviera desarrollado su parte digital, que no tuviera una cultura de trabajo en remoto, lo pasará mal. Al mismo tiempo, es una gran oportunidad para reconectar con los clientes, establecer una nueva relación de escucha activa y reescribir su historia con nuevos productos. La tecnología, sin la confianza del cliente, no sirve de nada”, apunta González-Estéfani.
Una idea en la que coincide, Sebastián J. Olivera, cofundador de WeFintech, la Red Iberoamericana de mujeres en fintech. "El COVID-19 ha acelerado el proceso de digitalización de forma extrema, interpelando simultáneamente a reguladores, prestadores y usuarios de servicios financieros", apunta.
"Quienes no incorporen en su estrategia de valor, la oferta basada en la experiencia de usuario digital; dejarán de ser una opción en las preferencias de los usuarios. La colaboración de los actores del sistema financiero y la innovación incorporada a las cadenas de valor, son las claves para enfrentar escenarios recesivos", añade al hablar de cómo ve el horizonte.
Cuadrar las cuentas en un momento complicado
Aunque se abren oportunidades en el horizonte, el presente es complicado. Precisamente este fue uno de los puntos que se abordaron en la techtulia organizada por The Venture City bajo el título: ¿A qué retos y oportunidades se enfrenta el sector financiero en estos tiempos de cambio?.
"La actual coyuntura impacta directamente en las condiciones de negocio de las fintech, así como en la capacidad para acceder a financiamiento; afectando el crecimiento y el flujo de ingresos", explica Olivera.
"Como contrapartida, la extrema necesidad de canales digitales para servicios financieros representa una oportunidad para que las fintech aporten valora la población con sus propuestas de servicio innovadoras. En este contexto altamente desafiante, las que logren extender su runway (la cantidad de meses que le queda a una empresa hasta que su cuenta bancaria quede a cero) y maximizar su cash burn rate (la caja que una startup gasta) tendrán una oportunidad dorada para salir fortalecidas", añade.
En este sentido, Laura Gómez Vargas, directora de innovación corporativa de Grupo Sura, un grupo de inversiones de América del Sur con sede en Colombia apunta que esta crisis será "un punto de inflexión" para aquellos que decidan y puedan, teniendo en cuenta tanto la mentalidad como los recursos de la compañía, enfocarse en la oportunidad con un manejo "positivo" de la incertidumbre.
"Las crisis siempre son oportunidades. Creo que a corto plazo esto es el examen final para muchas fintechs y modelos de negocio", resume Juan Esteban Saldarriaga, presidente de la junta directiva de Colombia Fintech. Para las empresas que logren sobrevivir el futuro es "muy prometedor" pero advierte de que ni todos los modelos pasarán, ni muchas fintech tampoco.
En este aspecto señala que sobre todo se verán afectadas a las empresas que se dediquen a temas de crédito, modelos “freemium” y P2P. Mientras que considera que es el mejor momento para fintech que se dedican a los pagos y todo lo que sea digitalización y onboarding digital (procesos para darse de alta en servicios). “Para mí, si será un punto de inflexión en la relación fintech-bancos, ya que, se acelerará la consolidación, las compras y las alianzas”, añade.