“No es que todo esté bien, pero no todo es un desastre”

Carlos Paredes quiere que la economía esté al alcance de todos y por eso trata de explicar y contextualizar en sus columnas que publica en Gestión los temas más destacados de la coyuntura. Esas columnas forman parte ahora de su tercer libro en el que rescata que no necesariamente todo es un desastre en el país.

Escribir no es para todos y más aún si se trata de economía, ¿cómo surge esta inquietud?
Cuando yo era estudiante universitario había un economista argentino, Juan Carlos de Pablo, que hacía esto y me gustó la idea desde entonces, porque en un libro ponía muchos artículos escritos para el gran público que nos servía a los estudiantes, pues explicaba problemas complejos con términos simples.

Y lo concretó.
Empecé a colaborar con Gestión a mediados de los años 90 y estuve casi tres años colaborando de una manera semanal. Ahí es donde nace mi columna Memorándum Económico, que a su vez se basa en Charles Schultze, que fue economista jefe del Gobierno de Jimmy Carter, en Estados Unidos, que tuvo un libro “Memos to the President”. De ahí sale eso. En esa época salían de la forma de memorándum dirigida a cada persona.

Hacer un libro no es cosa fácil, ¿cómo ha sido el proceso?
Este es el tercer libro que publicamos juntos con Gestión. Empezamos en el año 2009 y el objetivo no es un conjunto de artículos organizados de manera cronológica, sino que reflejen temas. Tienen una secuencia lógica, han sido ordenados de una manera que el lector pueda formarse una idea del problema y diversos aspectos del problema.

¿Qué incluye el libro?
Este libro incluye tanto aspectos de economía, de política económica, política macroeconómica, pero también muchos temas políticos, de nuestra fragilidad en la institucionalidad política, y tiene una última sección que trata sobre Venezuela, que creo que es un espejo frente al cual nos debemos mirar.

¿Por qué optó por ese título para el libro?
Con “Pero, de verdad, ¿todo es un desastre?“ uno podría pensar que este autor es un pesimista y yo no soy un pesimista. Soy un optimista empedernido que ama al Perú y que creo en la capacidad de seguir yendo para adelante porque tenemos que entender que hemos progresado muchísimo.

¿Hemos perdido de vista que hemos progresado?
A veces perdemos de vista lo mucho que hemos progresado y eso es algo con lo cual empieza este libro. De verdad todo no es un desastre. Nosotros hemos sido la estrella de América Latina y a pesar de la desaceleración seguimos creciendo más que el promedio de América Latina.

¿Cómo sobreponerse a la sensación de que todo es un desastre?
Yo creo que hay que hacer un esfuerzo, primero para transmitir: oye, hemos progresado en tantas cosas, hay tantas cosas buenas que estamos logrando que no es solamente historia. No solamente es retiramos a tanta gente de la pobreza. Bueno, ahora subió un poquito. Sí, subió un poquito, pero luchar contra la pobreza es un esfuerzo de décadas y tenemos que seguir en él.

¿Tenemos un problema grave con la corrupción?
Sí lo tenemos, pero tenemos las instituciones que en estos momentos nos están permitiendo luchar contra ellas. No es que todo esté bien, pero no todo es un ­desastre.