Pietro del Sante es parte del equipo de Euromotors desde hace cinco años y es gerente general de la marca de autos de lujo Bentley desde su llegada al Perú este año.
Del Sante se considera innovador. De hecho, señala que la clave para mantener un negocio es buscar constantemente ideas disruptivas. Asegura que la última decisión de este tipo que tomó en su vida personal fue la de convertirse en padre antes de los 30 años.
¿Por qué formar una familia fue una decisión disruptiva?
Normalmente, uno prefiere tener su carro, casa y que esté todo el statu quo bien sólido para recién lanzarse. En mi caso, estaba recién casado, buscando departamento y quería que mi hija tuviera todas las comodidades. A veces, es mejor trazarse objetivos disruptivos porque te vas a romper el lomo por cumplirlos.
¿Cómo surgió su pasión por los autos?
Eso corre por la sangre, porque mi padre es muy aficionado a los autos y mi abuelo también. Viene de familia.
¿Lo transmitirá a su hija?
Ella ha cumplido un año y ya empezó a mostrar gusto por los autos. Tiene uno pequeño. Se lo pensaba regalar a mi ahijado, pero cuando ella lo vio quiso quedárselo. Así que su afición la está descubriendo sola. No fue forzada.
¿Qué es lo que más le gusta de un auto?
El diseño y la potencia. Me gustan los autos puros y deportivos. Los únicos, los que hay pocos en el mundo.
¿Posee modelos únicos?
Esos son los autos que trato de coleccionar. Tengo uno que estoy restaurando.
¿Cuál fue el primer auto que restauró?
Un Porsche antiguo. No veo a mis autos como una inversión. Hay gente que lo hace pensando en que va a ganar un montón de dinero al venderlo.
¿Y en su caso?
Lo veo como una pasión. Me gusta saber que son valiosos, pero mi objetivo es usarlos, disfrutarlos con mi esposa e hija. Por lo mismo que son puros y antiguos, se necesita de una destreza para manejarlos. Los carros de ahora tienen muchos controles de seguridad en el sistema de freno y tracción.
¿Qué ha sido lo más difícil de su trabajo?
Cuando configuré mi auto de stock tuve que salir del amor por los carros y ponerme a pensar en qué les puede gustar a mis clientes. A veces, para separar pasión de trabajo, debes estar en desacuerdo contigo mismo.
¿Cuál es su talón de Aquiles?
Soy impaciente. Eso me juega en contra porque tengo episodios de frustración. A veces, la impaciencia junto a buscar el detalle extremo de la perfección también juegan en contra. Lo perfecto elimina lo bueno. Para eso tengo a un equipo que me responde rápido.
¿Cómo dirige a su equipo?
Trato siempre de sembrar confianza en él para que quien tenga que decirme algo, lo haga y yo también. Siempre hay una línea delgada que cuidar de distancia también.
¿Es difícil generar esa confianza con los colaboradores?
Trato de encontrar espacios para forjar el diálogo. Si no fluyen muchos de los proyectos, las iniciativas se pueden quedar entrampadas por el no diálogo. Por eso, busco tener puertas y teléfonos abiertos para tratar de estar siempre alineados y comunicados.
¿Por qué confía en su equipo?
Cada colaborador tiene habilidades y destrezas especiales. Al final, aprendo de mi equipo, como él de mí. Nos podemos alimentar así.
¿Qué es lo que más le disgustaría de su trabajo?
No lograr aterrizar y solidificar la marca Bentley en Perú.
¿Se sentiría culpable de no conseguirlo?
Frustrado e impotente de no poder responder al reto.
A veces, es mejor trazarse objetivos disruptivos porque te vas a romper el lomo por cumplirlos.
Ser impaciente y buscar la perfección juegan en contra. Lo perfecto elimina lo bueno.
Hoja de Vida
Nombre: Pietro del Sante.
Cargo: Gerente general de Bentley en el Perú.
Educación: Universidad del Pacífico.
Tiempo en el cargo: Dos meses.
Hobbies: coleccionar y restaurar autos.