Las aerolíneas estadounidenses, que amenazaron con demandar a las operadoras telefónicas AT&T y Verizon para pedir que retrasen el despliegue de la tecnología 5G, anunciaron que habían llegado a un principio de acuerdo para un retraso de la implementación hasta el 19 de enero.
Según representantes de la industria aérea, se llegó a un borrador de acuerdo de última hora primero con el operador AT&T, luego con Verizon, para retrasar nuevamente en 15 días el establecimiento de nuevas bandas de frecuencia 5G.
Una portavoz de AT&T confirmó que había llegado a un acuerdo con el Ministerio de Transportes y “aceptó dos semanas más para el despliegue del servicio”.
Los dos operadores “acuerdan no desplegar tecnología 5G el 5 de enero, es decir el miércoles, sino el 19 de enero”, dijo un funcionario de la industria aérea.
Verizon y AT&T habían rechazado este domingo una solicitud de las autoridades para posponer nuevamente la puesta en funcionamiento de la red 5G.
Si bien las aerolíneas invocan posibles interferencias con los dispositivos a bordo de las aeronaves en particular, la entrada en servicio de 5G, inicialmente programada para el 5 de diciembre, ya se había pospuesto y debía ser efectiva este miércoles.
“Nadie ha firmado nada todavía, pero por el momento estamos llevando a cabo la demanda por este período de dos semanas”, dijo un representante de las compañías aéreas.
Las empresas se preparaban para entablar una demanda para obtener este retraso y modificaciones técnicas en el despliegue de la red de conexión a alta velocidad.
Durante este “descanso de dos semanas”, los cambios realizados en las instalaciones de los aeropuertos en particular deberán ser revisados por la autoridad reguladora aérea federal de Estados Unidos, la FAA, “para garantizar que cumplen todas las condiciones de seguridad para los vuelos”.
Las bandas de frecuencia de 3.7 a 3.8 GHz se las adjudicaron a AT&T y Verizon en febrero después de una oferta por decenas de miles de millones de dólares.
Ante las preocupaciones sobre posibles problemas de interferencia con los dispositivos que miden la altitud en los aviones, la FAA había emitido nuevas directivas que limitaban el uso de estos aparatos en aviones en determinadas situaciones.
Pero las aerolíneas estadounidenses han protestado contra los posibles costos que la aplicación de las nuevas disposiciones les conllevaría y han pedido a las autoridades que encuentren rápidamente una solución.