La farmacéutica estadounidense Pfizer dijo el lunes que empezó ensayos clínicos en etapa intermedia y tardía de una píldora para prevenir el COVID-19 en personas expuestas al virus.
Varias compañías trabajan en posibles antivirales orales, que imitarían lo que el medicamento Tamiflu hace contra la influenza y prevendría que la enfermedad avance a un estado severo.
“Creemos que el combate al virus requerirá tratamientos efectivos para personas que contraen el virus o han estado expuestos a él, complementando el impacto que han tenido las vacunas”, dijo Mikael Dolsten, jefe de investigaciones científicas de la compañía.
Pfizer empezó a desarrollar este medicamento, bautizado PF-07321332, en marzo del 2020 y lo está evaluando en combinación con ritonavir, que ya se usa contra el virus del sida.
El ensayo clínico involucrará a 2,600 adultos que tomarán parte de la prueba apenas tengan señales de infección de COVID-19 o apenas sepan que estuvieron expuestos al virus.
De manera aleatoria recibirán una combinación de PF-07321332 y ritonavir, o un placebo, dos veces al día durante cinco o diez días.
El objeto de la prueba es determinar la seguridad y eficacia de los medicamentos en prevenir una infección de SARS-CoV-2 -el virus que provoca el COVID-19- y el desarrollo de síntomas hacia el día 14.
La píldora es conocida como un “inhibidor de proteasa” y en las pruebas en laboratorio ha demostrado detener el efecto replicador del virus.
Si funciona en la vida real, posiblemente solo será efectiva en las primeras etapas de infección.
Para el momento en que el COVID-19 avanza a un estado severo, el virus ha dejado básicamente de replicarse y los pacientes sufren de una respuesta inmune superactiva.