La población de cuatro de las especies de atún más capturadas comercialmente están mostrando signos de recuperación, pero el aumento del nivel del mar significa que el dragón de Komodo ahora está clasificado como en peligro de extinción en la última Lista Roja de especies en riesgo.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por su sigla en inglés), que recopila la lista, también está intensificando la monitorización de especies marinas como el coral y los caracoles de aguas profundas para ver cómo se ven afectadas por el cambio climático y amenazas como la minería en el fondo del mar.
“Las especies oceánicas tienden a ser descuidadas porque están bajo el agua y la gente realmente no presta atención a lo que les está sucediendo”, dijo a Reuters Craig Hilton-Taylor, jefe de la unidad de la Lista Roja de la IUCN.
Pero a medida que las cuotas de captura y los esfuerzos para apuntar a la pesca ilegal mostraron signos de funcionar, las perspectivas para el atún parecen estar mejorando.
, saltó tres categorías desde “en peligro” a “menor preocupación” en la lista, aunque algunas poblaciones regionales permanecieron severamente agotadas.
El atún rojo del sur también pasó de “en peligro crítico” a “en peligro”, mientras que el atún blanco y el rabil se clasificaron como “de menor preocupación”.
“El atún es una buena noticia: muestra lo que se puede hacer”, dijo Hilton-Taylor cuando la IUCN publicó el sábado su informe sobre 138,374 especies de plantas, animales y hongos, de los cuales más de una cuarta parte están actualmente en peligro de extinción.
El dragón de Komodo pasó a la categoría de peligro. El lagarto más grande del mundo está bien protegido en la isla de Komodo, en Indonesia, pero el aumento del nivel del mar debido al calentamiento global reducirá su hábitat, dijo la IUCN.
“La idea de que estos animales prehistóricos se han acercado un paso más a la extinción debido en parte al cambio climático es aterradora”, dijo Andrew Terry, director de conservación de la Sociedad Zoológica de Londres.
La IUCN también expresó su preocupación por los tiburones y las rayas, que están peor que el atún.
“Ahora tenemos que tomar ese ejemplo e intentar aplicarlo a la industria de los tiburones”, dijo Hilton-Taylor, que además destacó que el 37% de las rayas enfrentan la extinción en comparación con el 33% de los anfibios, el 26% de los mamíferos y el 12% de las aves.
La IUCN dijo el año pasado que un tiburón, recién descubierto formalmente, ya podría estar extinto.