- También firmó otras dos leyes
- Una de ellas contempla la construcción del muro fronterizo
El gobernador del estado de Texas, Greg Abbott, firmó una ley que criminaliza la entrada ilegal desde México, así como otras dos relacionadas a la seguridad fronteriza, que son un claro desafío al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y a las normas federales.
Se trata de la ley SB4, aprobada a mediados de noviembre por la Legislatura estatal, controlada por los republicanos, y que es considerada una de las normas migratorias más restrictivas en la historia del país.
Esta medida se aprueba siete meses después de que el gobernador de Florida, el también republicano, Ron DeSantis, estampara su firma en la dura ley migratoria SB1718.
“El objetivo de la ley 4 es detener la oleada de entrada ilegal en Texas”, comentó Abbott durante una ceremonia de la firma junto a la frontera en Brownsville. “El proyecto es ahora ley en el estado”. La ley se firmó junto con otras dos medidas para destinar fondos a la seguridad fronteriza.
Estas tres nuevas leyes reforzarán los esfuerzos sin precedentes de seguridad fronteriza de Texas y tomarán medidas enérgicas contra el tráfico de personas, disuadirán el flujo de cruces fronterizos ilegales y protegerán las vidas y propiedades de los tejanos al financiar la construcción en curso del muro fronterizo de Texas, indica el comunicado de la oficina de Abbott.
La SB4, que entra en vigor en marzo, “crea un delito penal por entrar ilegalmente a Texas desde un país extranjero” y prevé hasta 20 años de prisión por reincidencia, afirmó el gobernador durante el acto de firma. A continuación, conoce los diferentes puntos de la norma:
El gobernador de Texas firmó el 18 de diciembre otras dos leyes que tienen que ver con la seguridad migratoria:
El expresidente republicano Donald Trump, posible rival de Biden en estos comicios, declaró este fin de semana que los migrantes “envenenan la sangre” de Estados Unidos.
Tanto Gregg Abbott como Trump son partidarios de levantar un muro a lo largo de la frontera con México y de expulsar masivamente a los migrantes, muchos de ellos latinoamericanos que huyen de la violencia y la pobreza.
Los demócratas también llevan a cabo repatriaciones aceleradas para los migrantes que eluden las “vías legales” que han introducido para entrar a Estados Unidos.
Solo en octubre 2023 las autoridades estadounidenses interceptaron 240,988 veces a migrantes en situación irregular en la frontera con México, según datos oficiales. Fueron más de dos millones en lo que va de año.
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