El huracán Helene se fortaleció hasta volverse en una peligrosa tormenta de categoría 4 en las cálidas aguas del Golfo de México el último jueves 26 de septiembre y se espera que se fortalezca aún más, potencialmente convirtiéndose en una categoría 4 o superior, antes de tocar tierra en Florida, Estados Unidos. Los pronósticos indican que podría ser un posible escenario “catastrófico”, de enormes marejadas que podrían devorar casas enteras y vientos devastadores. El gobernador Ron DeSantis declaró el estado de emergencia en todo el territorio floridano, al igual que hicieron los gobernadores de Georgia y Carolina del Sur en numerosos condados de sus respectivos estados. En este artículo de Gestión Mix, te diremos qué estados de USA serían afectados por el paso del fenómeno.
El tiempo es crítico para que los floridanos se preparen. Miles de personas ya han sido evacuadas y gran parte del estado se encuentra bajo alerta de tormenta tropical. Helene amenaza con provocar lluvias devastadoras, vientos dañinos y mareas tormentosas potencialmente mortales. La región del Big Bend de Florida es la más amenazada, con marejadas de hasta 4,5 metros, y aún se está recuperando del huracán Debby, que azotó en agosto, y de Idalia, que tocó tierra como huracán de categoría 3 el año pasado.
El huracán Helene se encuentra a 273 kilómetros al oeste-suroeste de Tampa y a 330 kilómetros al sur de Apalachicola, según informó el Centro Nacional de Huracanes en una actualización poco habitual a las 14:25 horas del jueves. La tormenta se desplaza hacia el norte-noreste a 26 km/h, lo que supone 3 km/h más rápido que la actualización de las 11 horas.
Helene tenía vientos sostenidos de 120 mph, lo que la convirtió en un huracán de categoría 3. Para ser un huracán de categoría 4, los vientos sostenidos deben estar entre 130 y 156 mph.
Aunque se espera que el posible huracán Helene toque tierra en Florida, es posible que los estados del sur y del medio oeste de EEUU como Alabama, Arkansas, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Georgia, Illinois, Indiana, Iowa, Kansas, Michigan, Minnesota, Maryland, Mississippi, Misuri, Nebraska, Ohio, Tennessee, Texas y Winsconsin también tengan que prepararse para lluvias importantes y posibles inundaciones producto de este fenómeno meteorológico.
Se espera que el huracán Helene continúe fortaleciéndose en el Golfo de México antes de tocar tierra en la región Big Bend de Florida en algún momento del jueves por la noche.
A continuación se muestra la última trayectoria (cono) del NHC. Se esperaba que Helene se debilitara después de tocar tierra. Sin embargo, debido al tamaño, la velocidad y la fuerza de la tormenta, es posible que se produzcan vientos fuertes y dañinos en gran parte del interior del sudeste de los Estados Unidos.
El centro de Florida (Orlando y las ciudades aledañas) comenzó a sentir los efectos del huracán Helene el miércoles. El clima empeorará rápidamente el jueves por la tarde, con vientos con fuerza de tormenta tropical, ráfagas de viento, fuertes lluvias y la posibilidad de advertencias de tornado.
El peor clima se sentirá el jueves por la noche, cuando gran parte de la Florida Central experimentará vientos con fuerza de tormenta tropical, fuertes ráfagas de viento y fuertes lluvias, de hasta 4″ posibles en algunos lugares. También habrá posibilidades de que se desarrollen uno o dos tornados.
Los huracanes pueden causar daños significativos, incluso a cientos de millas de la costa. La temporada de huracanes comienza el 15 de mayo en el Pacífico Norte y el 1 de junio en el Atlántico y el Caribe, finalizando el 30 de noviembre. Es crucial que tú y tu familia estén preparados con suficiente antelación. Anota los números de emergencia y tenlos a mano, tanto en el refrigerador como en tu celular. Además, asegúrate de tener un kit de suministros de emergencia listo. Si vives en una zona de riesgo, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) brindan los siguientes consejos:
Contenido GEC