FOTOGALERÍA. La pandemia de coronavirus ha estado llena de sorpresas tecnológicas desagradables.
Nos topamos con el problema de la escasez perpetua de hardware, como las consolas de videojuegos y tarjetas gráficas. Apple anunció este año un importante cambio en el uso de los datos, incluyendo una herramienta para escanear los iPhone en busca de pornografía infantil que los críticos calificaron como una invasión a la privacidad. Además, muchos de nosotros que intentamos ordenar cubrebocas de alta calidad para protegernos del coronavirus tuvimos que nadar en un océano de falsificaciones, según el portal infobae.
No obstante, hubo algo positivo entre todo eso: lecciones valiosas para mejorar nuestra relación con la tecnología durante los años venideros, como convertirnos en compradores en línea con mayor conocimiento y tomar control de nuestros datos personales.
Piensa en ello como propósitos de Año Nuevo, pero para la tecnología. A continuación, mis mejores recomendaciones.
La pandemia, que llevó a muchos oficinistas a trabajar desde casa, mostró cuántos de nosotros teníamos conexiones lentas a internet. Eso subrayó lo poco que solemos invertir en nuestra infraestructura de internet, como el equipo de redes y servicios de banda ancha que nos brindan la conexión a internet de nuestros dispositivos.
Cuando las personas gastan en tecnología; en general, compran aparatos antes que otras cosas. Electrónicos como los reproductores de video en continuo estuvieron entre los artículos más vendidos durante el Black Friday, según un informe de investigación publicado el mes pasado por Adobe.
Pero deberíamos gastar en infraestructura antes que en dispositivos. Una quinta parte de los consumidores conservan sus enrutadores durante más de cuatro años, según una encuesta realizada este año por Consumer Reports. Eso es mucho, porque deberíamos cambiar nuestros enrutadores wifi entre cada tres y cinco años, afirman expertos en tecnología inalámbrica. Los nuevos enrutadores incorporan nuevos estándares wifi que mejoran las velocidades y las técnicas para mitigar la congestión de la red, lo que facilita que múltiples dispositivos en una casa (como computadoras portátiles y consolas de videojuegos) tengan una conexión rápida y estable a internet.
Si tu enrutador es relativamente nuevo y tu conexión sigue siendo deficiente, ponte en contacto con tu proveedor de internet. El plan de banda ancha que contrataste hace muchos años podría ya no ser suficiente, así que considera invertir en uno más rápido. Si en tu casa transmiten o ven muchas emisiones en continuo y juegan videojuegos en línea, piensa en alrededor de 40 megabits por segundo.
Si intentaste comprar en línea una mascarilla de alta calidad durante la pandemia, es probable que hayas encontrado una abundante cantidad de cubrebocas apócrifos. Los falsificadores han inundado el mercado con mascarillas deficientes, un problema que persiste en la actualidad.
Aunque los productos falsos en línea han sido un problema desde hace mucho tiempo, la pandemia ha hecho que el asunto ponga potencialmente en riesgo nuestra vida con los cubrebocas. Amazon y otros minoristas tienen políticas para vetar a los vendedores de mascarillas falsas, pero nuevos comerciantes con cubrebocas apócrifos surgen de manera constante. Se ha convertido en un juego del gato y el ratón.
¿La lección? Siempre investiga antes de dar clic en el botón de comprar. Lee las reseñas de quienes adquirieron mercancía con el vendedor. Revisa al comerciante y si es una marca desconocida, indaga sobre su reputación. Algunas herramientas en línea como Fakespot pueden escanear la página de un producto para buscar señales de productos de imitación y reseñas falsas.
Sé especialmente cuidadoso cuando compres cualquier cosa que pueda afectar la salud, incluyendo vitaminas y alimento para perros. Cuando tengas dudas, compra esos productos en una tienda física de reputación probada.
Apple, que desde hace mucho tiempo se ha presentado a sí misma como una compañía defensora de la privacidad digital, protagonizó una de las mayores sorpresas tecnológicas de este año.
En agosto, la compañía anunció una actualización de software con una novedad. El software incluía una herramienta para escanear los iPhone en busca de código vinculado a una base de datos de pornografía infantil conocida. Después de detectar cierta cantidad de coincidencias, un empleado de Apple podría revisar las fotografías antes de informar al Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados de Estados Unidos.
La intención positiva de Apple de evitar que imágenes de abuso infantil se propagaran fue rápidamente eclipsada por las implicaciones invasivas de su sistema de marcación de contenido, que iban en contra de la imagen a favor de la privacidad de la compañía. En respuesta a los reproches, Apple pospuso el lanzamiento de la función de software y aclaró que la tecnología podría ser desactivada si las personas decidieran cancelar el respaldo de sus imágenes a su servicio en la nube, iCloud.
El suceso fue un recordatorio de que cuando usamos servicios en la nube, nuestros datos están a merced de una empresa tecnológica. ¿La lección? Debemos considerar cambiar cómo manejamos nuestros datos para que seamos más independientes de las grandes compañías y de sus servicios en la nube.
Tomar una estrategia híbrida con nuestros datos es la mejor manera de avanzar, aconsejaron expertos en seguridad. Eso consiste en respaldar nuestros datos en la nube, pero también en hacer una copia en dispositivos como unidades físicas de almacenamiento y memorias USB miniaturas. Tener una copia de seguridad local garantiza que tendrás acceso a archivos importantes incluso si se presenta una falla en el servicio de internet. Además, si te sientes insatisfecho con un servicio en la nube o te hartas de pagar las cuotas de suscripción, tienes una salida fácil porque ya hay una copia de tu información.
Solo el 17 por ciento de las personas optan por la estrategia híbrida, según Acronis, una firma de protección de datos. No procrastines: entre más tiempo esperes para crear respaldos locales de tus datos, más difícil será salirte de un servicio en la nube si decides abandonarlo.
El mes pasado, muchos compradores que intentaron conseguir gangas durante el Black Friday y el Ciber Monday rápidamente se dieron cuenta de que algo faltaba.
Muchos artículos que con frecuencia compramos a precios con descuentos, como nuevos enrutadores wifi y computadoras portátiles baratas, no tenían rebajas o no había existencias. Eso fue en gran parte debido a la escasez global de chips y a las cadenas de suministro afectadas, las cuales han complicado la fabricación y el envío de artículos en todo el mundo.
Esperar hasta el Black Friday para gastar a lo grande pocas veces ha sido una buena decisión, pero la escasez causada por la pandemia ha hecho esto más evidente que antes. A lo largo de todo el año, a menudo surgen ofertas que son igual de buenas (y en ocasiones mejores) que las promociones del Black Friday.
Lo complicado es saber cuándo lo más popular está más barato. Hay muchas maneras de rastrear descuentos, como seguir sitios que envíen alertas sobre estos. Por ejemplo, nuestra publicación hermana Wirecutter monitorea ofertas en su cuenta de Twitter y sitio web.
Herramientas automatizadas como Camel Camel Camel, un sitio web que te permite agregar productos vendidos en Amazon y configurar alertas por correo electrónico cuando baje el precio, también pueden ayudarte a darle seguimiento a promociones para artículos específicos. En el futuro, puedes adelantarte al frenesí de las compras de fin de año y potencialmente evitar el Viernes Negro.