La agencia crediticia Moody’s descartó que los ataques del sábado contra dos refinerías de la compañía Saudí Aramco, que han rebajado su producción en un 50%, vayan a tener un impacto duradero en el perfil financiero de la mayor petrolera del mundo, que prevé salir a bolsa en los próximos meses.
"Si bien los ataques con drones contra dos instalaciones petroleras saudíes son un crédito negativo y la interrupción en la producción es significativa, no esperamos que esto cause un impacto duradero en el perfil financiero de Aramco", aseveró el vicepresidente de Moody's, Rehan Akbar.
Según un comunicado de la agencia, el mantenimiento de su perfil será posible gracias a la "robusta" hoja de balance y el "fuerte" colchón de liquidez de la empresa, que Moody's considera la de mayores ganancias del mundo.
Desde el punto de vista crediticio, el director gerente del grupo, Steve Wood, ve el ataque como un reflejo del importante papel que tienen los riesgos geopolíticos en los precios del petróleo, que hoy registraron la mayor subida en décadas.
En este sentido, Wood consideró que la subida de costes será positiva a corto plazo para los productores y dañará a las refinerías, si bien los efectos a largo plazo en las energéticas dependerá de lo que Aramco tarde en restablecer la producción y su magnitud.
El ataque del sábado, reivindicado por los rebeldes hutíes del Yemen y del que Estados Unidos ha acusado a Irán, ha disparado el precio del crudo Brent, de referencia en Europa, en 10.5% a la apertura este lunes del mercado de futuros de Londres.
Mientras algunos países barajan la posibilidad de aumentar su producción para contrarrestar la suspensión de la petrolera estatal saudí, Rusia descartó hoy que la OPEP y los demás productores de petróleo (conocidos juntos ya como OPEP+) vayan a establecer medidas de emergencia ante la situación.