La compañía biotecnológica alemana CureVac anunció que entabló una demanda por presunta infracción de patente contra su rival BioNTech por un trabajo que, asegura, contribuyó al desarrollo de la vacuna contra el coronavirus de BioNTech y su socio Pfizer. BioNTech respondió que su trabajo es original y que impugnaría “enérgicamente” la querella.
El año pasado, CureVac reportó resultados decepcionantes de las últimas pruebas de su propia vacuna contra el COVID-19. La compañía dijo que estaba buscando una “compensación justa” por parte de BioNTech relacionada con la supuesta conducta inapropiada, pero no mencionó una cantidad.
CureVac dijo que no buscaría una orden judicial y que no “tiene la intención de emprender acciones legales que impidan la producción, venta o distribución” de la exitosa vacuna Comirnaty fabricada por BioNTech-Pfizer.
Tanto CureVac como BioNTech han trabajado en el desarrollo de la tecnología de ARN mensajero empleada en sus vacunas respectivas y potencialmente para otros usos.
CureVac dijo que presentó su demanda contra BioNTech y dos subsidiarias en un tribunal estatal de Düsseldorf. Afirmó en un comunicado que su cartera de propiedad intelectual “protege múltiples inventos que se consideran esenciales para el diseño y desarrollo de la vacuna de ARNm del SARS CoV-2 de BioNTech, entre otros”.
Esos, dijo, se relacionan con la ingeniería de moléculas de ARNm, incluidas las modificaciones de secuencia para aumentar la estabilidad y las formulaciones de vacunas de ARNm específicas para las vacunas contra el SARS CoV-2.
En un comunicado, BioNTech respondió que valora y respeta los derechos de propiedad intelectual válidos. Agregó que su “trabajo es original y lo defenderemos enérgicamente contra todas las acusaciones de infracción de patentes”.
“Sin embargo, somos conscientes de que no es inusual que otras compañías de la industria farmacéutica, habiendo sido testigos del éxito de Comirnaty, sugieran ahora que la vacuna infringe potencialmente sus derechos de propiedad intelectual”, añadió.