
Nueva York e Illinois implementarán, a partir del 2026, una serie de cambios en las normativas que regulan los supermercados. Estas actualizaciones legales prometen modificar la forma en que los residentes realizan sus compras diarias. En la siguiente nota, te indicaré cuáles son esas modificaciones y qué impacto favorable tendrá.
En Illinois, se oficializó que, desde el 1 de enero del 2026, se eliminará el impuesto estatal del 1% sobre la venta de comestibles, específicamente en los alimentos básicos que compraban estos ciudadanos para su hogar.
La medida, impulsada por su gobernador JB Pritzker, tiene como propósito reducir la carga fiscal en los hogares de esta región; sobre todo, en aquellas familias con escasos ingresos. Sin embargo, esta medida puede resultar beneficiosa según la localidad.
A pesar de la iniciativa, los expertos en economía afirman que aún se debe prestar atención a otros factores del sistema fiscal local. Por ejemplo, los servicios públicos esenciales aún siguen dependiendo de ingresos tributarios.

En el caso de Nueva York, las autoridades pretenden mejorar la inclusión financiera y la protección del consumidor. Mediante el Proyecto de Ley Bill S4152A, firmado por su gobernadora Kathy Hochul, se prohíbe que establecimientos minoristas y de alimentos rechacen pagos en efectivo.
Es decir, desde marzo del 2026, los comercios deberán aceptar cualquier tipo de billete o moneda sin aplicar algún recargo. En caso un negocio rechace esta modalidad de pago, se le impondrá multas civiles por infringir esta normativa estatal.
En tiempos recientes, los ciudadanos tienen la costumbre de efectuar sus pagos con tarjetas de crédito o billeteras digitales; sin embargo, existe una minoría que no puede acceder a estos recursos electrónicos.

No sería lo único; Nueva York también ordenó a los negocios de comercio electrónico que sus políticas de devolución de productos vendidos en línea deben ser “claros y visibles” en las boletas del consumidor.







